Raúl Torres Guerrero, el único diputado migrante que hay en el Congreso de la Ciudad de México, insistió en su petición a la Junta de Coordinación Política de este órgano para que establezca las bases a fin de que los legisladores que están en su condición puedan participar en las sesiones de pleno, comisiones y comités, ya sean ordinarias, extraordinarias, solemnes o permanentes de forma remota.
Argumentó que la diputación migrante en el Legislativo capitalino requiere de un mecanismo de cercanía con los más de 114 mil chilangos que radican en el extranjero para atender sus demandas y gestionar los apoyos ante las instancias tanto a nivel de alcaldía como de Gobierno central.
El diputado añadió que la migración de mexicanos y capitalinos no ha cesado, pues, dijo, los resultados del Censo de Población y Vivienda del 2020 arrojaron que de enero del 2015 a marzo del 2020, al menos 802 mil 807 personas migraron de México para residir en el extranjero, de las cuales, 5.4 por ciento es de la Ciudad de México.
Torres Guerrero recordó que se han presentado dos iniciativas que versan sobre la posibilidad de que quien ocupe la figura de la diputación migrante pueda legislar a distancia y de forma híbrida.
Cabe resaltar que durante la primera legislatura del Congreso de la Ciudad de México, el entonces diputado de Morena Ricardo Ruiz Suárez, hoy secretario de Gobierno local, presentó una iniciativa que proponía que para no desvincular a esta figura de su comunidad y que pueda representarla de forma eficaz, tuviera la posibilidad de sesionar vía remota.
La segunda propuesta la presentó el PAN en la actual legislatura, con la finalidad de que cualquier legislador foráneo pueda participar en las diversas sesiones de trabajo a través de medios digitales.
