A partir del 1 de enero, adiós a los plásticos de un solo uso

Divididos empresarios y Gobierno, a 1 día del fin de los desechables

Industriales dudan que la medida le funcione al programa ambiental; señalan falta de infraestructura y advierten altos costos en restaurantes y negocios

Una joven deja caer popotes en una tienda de desechables en la CDMX, en julio de 2018.
Una joven deja caer popotes en una tienda de desechables en la CDMX, en julio de 2018. Foto: Cuartoscuro

Adiós a los plásticos de un solo uso. Desde este viernes 1 de enero de 2021, en la CDMX no será legal la utilización de tenedores, cuchillos, cucharas, palitos mezcladores, platos, popotes o pajitas, bastoncillos para hisopos, globos y sus varillas, vasos y tapas… en el marco de la entrada en vigor de una reforma ambiciosa aprobada en 2019.

Ante lo inminente de la medida, que llega justo cuando la pandemia detonó el uso de los desechables, particularmente en restaurantes que se enfocaron a las entregas a domicilio, los industriales del plástico se encuentran escépticos de que los objetivos del programa ambiental del Gobierno capitalino se logren bajo los alcances de esta ley.

Mónica Conde, directora general de Ambiente Plástico, comentó que muchos de los utensilios compostables no serán útiles por la humedad de los alimentos, además de que los encargados se verán obligados a aumentar sus precios, ya que los materiales biodegradables son más costosos.

Están tratando de meter productos que no son reciclables, aunque dicen que son compostables. Ahora, pregunto, ¿dónde están las plantas y la infraestructura para hacer composteo en la Ciudad de México? No hay
Mónica Conde, Directora de Ambiente Plástico

En un comparativo realizado a través de precios de desechables por mayoreo en Internet, La Razón encontró que en la mayoría de los recipientes más utilizados por restaurantes o negocios de comida, los precios se disparan hasta en 272 por ciento. Es el caso de las llamadas hamburgueseras. El precio por 50 piezas de un solo uso ronda los 80 pesos, mientras que con material biodegradable alcanzan casi los 300 pesos.

Lo mismo ocurre con los contenedores de comida con divisiones. Cincuenta piezas de unicel se venden en 172 pesos, mientras que los que están fabricados con material compostable, la misma cantidad, cuestan cerca de 550 pesos.

Gráfico
Gráfico

Los industriales del plástico también pusieron en duda que los desechables biodegradables sean completamente amables con el ambiente, ya que, de acuerdo con Mónica Conde, algunos de estos productos tienen una base de plástico, porque los de cartón son inestables. Otros, señaló, están hechos a través de una técnica de laminación que complica su reciclaje.

“Están tratando de meter productos que no son reciclables, aunque dicen que son compostables. Ahora, pregunto, ¿dónde están las plantas y la infraestructura para hacer composteo en la Ciudad de México? No las hay”, declaró en entrevista para La Razón.

Miguel Ángel Delgado, presidente de la Comisión de la Industria del Plástico Responsabilidad y Desarrollo Sustentable, expuso a este medio que las autoridades locales no entienden que no se trata de evitar la generación de residuos, sino de hacer que no se genere más basura, por lo que, dijo, lo que se necesita es una cultura del reciclaje.

La gran mayoría se han ido adecuando, esencialmente vamos a seguir con apercibimientos, no con grandes multas; informando, apoyando y generando las condiciones para que el programa ambiental de la ciudad siga avanzando
Claudia Sheinbaum, Jefa de Gobierno

El empresario afirmó que no hay un estudio de la medición del impacto que conlleva el cambio de materiales, pues la decisión consideró más posicionamientos políticos que técnicos.

Además, señaló que para la industria, la pandemia dificultó la accesibilidad para adquirir nueva tecnología de los materiales compostables, porque se suspendieron ferias y cerraron los centros de investigación nacionales con los que se puede colaborar en la materia.

NO HAY PLAZO QUE NO SE CUMPLA

Estas nuevas disposiciones que buscan poner fin a los plásticos de un solo uso son parte de la segunda etapa de las reformas a la Ley de Residuos Sólidos.

En una primera etapa, la legislación estableció la misma prohibición para las bolsas de plástico, aunque en este caso se emitió una aclaración, en marzo de 2020, para precisar que las bolsas sí pueden usarse por inocuidad, salud, salubridad y sanidad. Al contrario, la prohibición para los plásticos de un solo uso no tiene, hasta este momento, ninguna consideración extra.

Gráfico
Gráfico

De acuerdo con la Ley, quienes incumplan estas disposiciones, se harán acreedores de una multa de 500 a 2 mil veces la Unidad de Cuenta de la Ciudad de México vigente, lo que equivale a desde 43 mil 440 a 173 mil pesos; no obstante, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, aseguró que no habrá necesidad de aplicar este tipo de penalizaciones.

“La gran mayoría se ha ido adecuando, esencialmente vamos a seguir con apercibimientos, no con grandes multas; informando, apoyando y generando las condiciones para que el programa ambiental de la Ciudad de México siga avanzando”, dijo ayer.

Cuestionada sobre el uso de plásticos desechables en la pandemia, la mandataria explicó que la emergencia sanitaria no interfiere en el trabajo del programa ambiental de la CDMX, un compromiso asumido por su administración, que incluso ha recibido reconocimientos nacionales e internacionales.

La Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México inicio este año recorridos por restaurantes, principalmente de zonas como la colonia Roma y Condesa; sin embargo, éstos tuvieron pausas por la emergencia sanitaria, de modo que al último corte apenas se visitaron 58 locales. Asimismo, el Gobierno capitalino tiene activa una campaña en redes sociales, con el fin de informar cómo aplica esta nueva disposición.

Temas: