Foto: Cuartoscuro
México.- El procurador capitalino, Miguel Ángel Mancera Espinosa, confirmó que en el expediente del caso de la muerte de Digna Ochoa y Plácido hay dos pruebas periciales que confirman plenamente que la activista por los derechos humanos tenía tendencias suicidas.
En entrevista, el titular de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) reiteró que el caso se encuentra cerrado tras la revisión de los elementos de prueba realizados, como lo instruyó un amparo que obtuvo la familia de la activista.
Subrayó que no hay una sola evidencia que permita presumir que Ochoa fue asesinada, ya que los dictámenes químicos y de mecánica de hechos verifican que ella se disparó con un arma de fuego, mientras que los exámenes psicológicos advierten desórdenes en su personalidad.
“Digna Ochoa enfrentaba una problemática personal que tal vez ahora ya sea innecesario abundar, pero lo que podemos decir en este sentido es que dos exámenes periciales en psicología son coincidentes en que hay una personalidad que muestra tendencia suicida”, enfatizó Mancera.
Respecto a las lesiones en el cuerpo de la activista las pruebas periciales corroboraron que se trataron de golpes anteriores al día en que ocurrió la muerte, lo cual fue reiterado por especialistas extranjeros.
Sobre la inconformidad expresada por la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal respecto a la determinación del no ejercicio de acción penal en el caso, Mancera reiteró que el amparo sólo instruía la revisión de los elementos ya aportados y en los cuales se sustenta la indagatoria.
“Si no hay conformidad de la otra parte o de la familia por lo resuelto pues pueden acudir a una autoridad federal, nosotros hemos cumplido con lo que dictaba la sentencia de amparo”, aclaró el procurador de la ciudad.
jcp