Centenares de afiliados a la Sección Nacional de Criadores de Aves de Combate (SNCAC), simpatizantes de esta actividad y de la fiesta brava, así como santeros, realizaron una marcha por calles del centro en contra de la prohibición de actividades con animales, como son las peleas de gallos, la tauromaquia y la venta de especies para actos de culto.
Un contingente de defensores de esto que llamaron “tradiciones” marchó hacia el Congreso de la Ciudad de México para concluir su protesta en la plancha del Zócalo capitalino, mientras otro se dirigió al Circuito Interior, en donde bloqueó por unas dos horas algunos accesos al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, lo que generó un severo caos vial en ese punto del oriente de la capital.
Los manifestantes, provenientes de varios estados del país, expresaron su rechazo al contenido de la Ley de Protección a los Animales de la Ciudad de México, que prohíbe las peleas de gallos y perros, y a una iniciativa que está en estudio que proscribe la venta de animales para ritos.
Mientras el principal contingente avanzaba por Paseo de la Reforma con mantas con leyendas como: “Nuestras tradiciones son cultura y fuente de empleo”, se pudo apreciar entre la multitud a varios grupos de mariachis y a gente que se manifestaba a caballo.
Aproximadamente a las 14:00 horas, al Zócalo capitalino arribaron centenares de manifestantes, mientras que un poco antes el otro contingente llegó en operación hormiga a la entrada principal del AICM, mientras el tránsito en Circuito Interior fue interrumpido.
Los manifestantes se plantaron en las puertas 1 y 9 de la terminal aérea y sobre el arroyo vehicular. Tras una hora permitieron el tránsito en un carril del Circuito, aunque ya las filas de automóviles llegaban hasta la calzada Ignacio Zaragoza, en donde se generó un nudo vial.
Los embotellamientos se extendieron a otras vías cercanas, como el Eje 1 Norte, Viaducto Rio de la Piedad, Añil y Plutarco Elías Calles.
Ante la situación, elementos de la Subsecretaría de Tránsito de la SSC apoyaron con camionetas de la dependencia a algunos usuarios del Aeropuerto y los llevaron a las puertas 2, 3, 4 y 5, por las cuales se podía acceder a la terminal.
El caos en la zona hizo que algunos trabajadores del Aeropuerto salieran y apoyaran a los policías en las labores para agilizar el tránsito, lo que no evitó que algunos pasajeros perdieran sus vuelos por no poder llegar a tiempo.
Fue el caso de Génesis, una viajera frecuente que ayer no pudo ingresar oportunamente a la terminal aérea. “Siempre anticipo mis salidas, sobre todo cuando tengo que salir del país, soy muy disciplinada con mis asuntos de trabajo, y hoy (ayer) salí de mi casa con mucho tiempo de anticipación, pero vengo llegando hora y media después de lo previsto y ya no puedo abordar mi avión”, compartió.
Génesis dijo que la daba mucho coraje que “por esta manifestación, que ni siquiera es por una buena causa, pues va contra los animales, haya perdido mi vuelo”.