La tarde de este lunes, un grupo de personas que se identificaron como simpatizantes del presidente Andrés Manuel López Obrador, intentaron derribar las vallas metálicas que marcan la periferia del campamento que el Frente Nacional Anti AMLO (FRENA) instaló en el Zócalo capitalino desde el 19 de septiembre.
Los integrantes del campamento de FRENA aún apostados en el Zócalo, luego de que el movimiento decidiera levantar el plantón este domingo, repelieron los ataques del grupo de 30 personas que iniciaron los disturbios alrededor de las 16:30 horas, encarándoles con consignas y arrojando objetos en su contra. Los campistas de FRENA accionaron extintores contra los agresores.
Elementos del Grupo Metropolitano de Auxilio a la Población se presentó con escudos para reforzar la valla metálica e impedir algún enfrentamiento mayor.
El grupo de agresores fue encapsulado por los elementos policíacos entre la calle de Francisco I. Madero y 5 de Mayo, y aún se mantiene en las inmediaciones del Zócalo.
La policía mantiene presencia en el lugar, en resguardo de los campistas de FRENA.
FRENA, escindido
El Frente Nacional Anti AMLO (FRENA) desconoció a las personas que mantienen el plantón en el Zócalo de la Ciudad de México, y se deslindó de cualquier delito o altercado que suceda, pues ayer informó su retirada.
"Frena se deslinda de cualquier altercado, o delito en Zócalo CDMX. Reales integrantes se retiraron", dijeron en un mensaje, lo que habla de una división al interior del movimiento.
A través de redes sociales la vocería del movimiento añadió: "Dejamos su caballo de Troya infiltrados y vividores solos".
¿Cómo llegó el FRENA al Zócalo de la Ciudad de México?
El FRENA comenzó a popularizarse por las manifestaciones en automóvil que hacían cada fin de semana para protestar contra el manejo de la pandemia de la COVID-19.
El 19 de septiembre trataron de llegar al Zócalo pero la policía lo impidió y decidieron acampar bloqueando el centro de la capital.
Finalmente, el 23 de septiembre consiguieron autorización para instalarse en el Zócalo, frente al Palacio Nacional.
Aunque colocaron cerca de 300 tiendas de campaña, la gran mayoría de los protestantes, muchos de clases acomodadas, dormían por la noche en sus casas.