El Jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, presentó un decreto para la protección de las Áreas de Conservación Patrimonial de los pueblos y barrios originarios de la Ciudad de México.
En conferencia, el mandatario capitalino compartió que en el transcurso del último siglo los pueblos y barrios originarios han sido objeto de despojo, pero han sido defendidos por sus pobladores; sin embargo, la expulsión sigue presente.
“Buscamos proteger a nuestros pueblos, a sus pobladores, su patrimonio cultural, su arquitectura, su forma de vida y lo que coloquialmente se llama cascos históricos de los pueblos”, sostuvo.
Por ello, anunció que publicaría en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México el decreto por el que se ordena el establecimiento de acciones y medidas para la protección de las Áreas de Conservación Patrimonial y espacios de los pueblos y barrios, el cual entrará en vigor hoy.
Batres Guadarrama destacó que el objetivo es preservar valores, proteger la identidad y fortalecer el tejido social y cultural de los sitios de la capital que obtengan esta categoría.
De acuerdo con el Ejecutivo local, serán tomadas en cuenta las Áreas de Conservación Patrimonial que estén localizadas en lugares cuya fundación y ocupación data de la época prehispánica y de finales del siglo XIX.
El Programa General de Ordenamiento Territorial detalla que actualmente hay 176 Áreas de Conservación Patrimonial y abarcan 27.73 por ciento del total de superficie de la capital.
Batres Guadarrama mencionó que se propone que el ámbito de aplicación para los efectos del decreto serán las áreas de conservación patrimonial que se encuentren en pueblos y barrios de la capital, las cuales deberá determinar la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi).
En entrevista con La Razón, el titular de la Seduvi, Inti Muñoz Santini, explicó que para la delimitación de estos espacios serán considerados varios factores como el paisaje urbano, las formas en que ha evolucionado el desarrollo urbano, las tradiciones, entre otros.
“Se tomarán en cuenta criterios de paisaje histórico, las formas en que ha evolucionado el desarrollo urbano, el equilibrio barrial nacional, cultural, las tradiciones, la historia de cada barrio para que no haya tensiones o problemas cuando en un tejido de barrio o pueblo aparezca un desarrollo habitacional y desequilibre la calidad de vida”, dijo.
En el transcurso del último siglo, estos pueblos han sido objeto del embate de las más diversas formas de despojo y, sin embargo, han sabido resistir reconociéndose como pueblos y barrios. En la creación de medidas de protección de los pueblos, se conjunta la defensa del patrimonio culturalMartí Batres, Jefe de Gobierno
El funcionario sostuvo que la capital cuenta con un Programa General de Desarrollo Urbano desde 2003, el cual sustentará el decreto, así como los programas delegacionales de Desarrollo Urbano que están vigentes en las 16 alcaldías.
Explicó que en los 16 programas delegacionales y 50 programas parciales, se definen las áreas de conservación, las cuales se van a analizar para dictaminar los proyectos arquitectónicos que se desarrollen para implementar nuevas medidas o suspender la aplicación de otras.
“Las áreas están en toda la ciudad, obviamente están de manera importante en zonas que no estuvieron inicialmente en la ciudad central y que con el crecimiento fueron absorbidas, pero también están en Iztacalco, Azcapotzalco, Venustiano Carranza, hay bastante equilibrio en la ubicación en el territorio”, subrayó.
Aseguró que las medidas han sido analizadas a lo largo de la administración, lo que ha permitido identificar que ha habido impactos negativos cuando se aplican instrumentos de desarrollo urbano sin tomar en cuenta las áreas de conservación patrimonial.
Muñoz Santini aseguró que es el principio de un gran engranaje que se tiene que hacer entre políticas que se refuercen al final de la administración, para que en la gestión de la Jefa de Gobierno electa, Clara Brugada, retome para fortalecer una política integral en el equilibrio del desarrollo urbano.