El albergue Tochán, ubicado en la alcaldía Álvaro Obregón, Ciudad de México, cerró sus puertas desde la semana pasada, luego de que los migrantes originarios de Haití abarrotaron el lugar y colapsaron la atención que era principalmente para centroamericanos, aseguró su directora Gabriela Chalte.
En entrevista con La Razón explicó que en el albergue hay capacidad solamente para 30 personas, pero desde la llegada de la ola haitiana el cupo alcanzó hasta 60 personas, por lo que tuvo que suspender el ingreso de personas, debido a que diariamente acuden migrantes a pedir un lugar.
“Sí, tuvimos que cerrar, ya no tengo lugar para más, estamos saturados y ya no podemos recibir a más. Estábamos enviando gente al albergue Cafemín en la alcaldía Gustavo A. Madero, pero ya tampoco están recibiendo porque tampoco tienen lugar, ya está saturado todo”, dijo.
La activista mencionó que por el momento tienen a 30 migrantes haitianos en el albergue y a 30 de Centroamérica , pero en la calle del lugar diariamente llegan taxis a tocar y pedir un lugar para resguardarse mientras tienen abiertas sus solicitudes de asilo ante la Comisión Mexicana de Ayuda al Refugiado (Comar).
En las últimas semanas, Gabriela Chalte ha tenido que buscar a más proveedores para contar con lo necesario para atender a los migrantes, ya que a diario se les brindan tres comidas y utilizan diversos insumos como jabón, shampoo u otros artículos básicos para su consumo personal.
En el lugar son sólo adultos que viajan solos, aunque hay una familia con una menor a la que acogieron al ya no existir lugar en otros lados.
EGC
