Ayer, el Pleno del Congreso de la Ciudad de México, aprobó la denominada “Ley Hídrica”, que busca simplificar y digitalizar los trámites administrativos para que empresas, conjuntos habitacionales o comerciales puedan acceder al servicio de agua potable.
El decreto aprobado reforma los artículos 4 y 62 de la Ley del Derecho al Acceso, Disposición y Saneamiento del Agua de la Ciudad de México, para facilitar los trámites de agua potable a inmuebles, conjuntos habitacionales, industriales o comerciales, si éstos se encuentran en un polígono con “factibilidad positiva”.
La discusión tuvo lugar a la par que a las afueras del recinto, un grupo de manifestantes bloqueó por un par de horas el acceso principal, tras acusar que con esas “facilidades” al sector industrial, comercial y a proyectos inmobiliarios, se “vulnera” el derecho al agua a los pueblos y barrios de la capital.
En el contexto de sequía y desabasto de agua que enfrenta la capital en esta época de estiaje, los vecinos de distintas colonias protestaron con pancartas y carteles en los que se leían consignas como “el agua es un derecho, el cartel inmobiliario un negocio de muerte y corrupción”.
Con megáfono en mano, representantes del Frente de Pueblos y Barrios Originarios, junto a habitantes del Pueblo de Xoco, alegaron que esas zonas de la capital sufren por la gentrificación y mala gestión del agua.
De forma simultánea, en conferencia de prensa, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, se pronunció al respecto de esta iniciativa, y negó que con su aprobación se pretenda beneficiar a las grandes empresas inmobiliarias.
“Los procesos de digitalización lo único que hacen es mejorar los sistemas, pero no tiene absolutamente nada que ver y es falso, absolutamente falso que nosotros automáticamente queramos generar desarrollos inmobiliarios en cualquier lugar de la ciudad, es una falacia, no sé qué otro objetivo tenga la movilización”, dijo.
El dictamen fue aprobado después de las 16:00 horas, cuando ya no había manifestantes afuera del recinto.