Tras la protesta de padres de familia afuera de la escuela Liberación Campesina, en Azcapotzalco, por vender comida podrida a sus hijos, el diputado del PAN Gonzalo Espina Miranda pidió a las autoridades identificar a los proveedores en toda la red de escuelas de nivel básico para conocer los estándares de calidad que manejan.
Espina Miranda apuntó que se trata de un daño directo a la salud, porque la comida en malas condiciones causa enfermedades que pueden ser tan graves al grado de internar al menor en un hospital.
Argumentó: “Sería muy importante que las autoridades miren este problema con seriedad, y que verifiquen bien a quién le compran la comida y a quién le dejan vender, que se cumpla con los procedimientos de higiene”.
Espina Miranda adelantó que en breve presentará un punto de acuerdo para que la Cofepris y la SEP implementen nuevos filtros sanitarios para proveedores de alimentos en escuelas, “tanto para las empresas que venden la comida empaquetada, como para quienes acuden y preparan ahí mismo los menús a la hora del receso”.
Espina resaltó que difícilmente los padres conocen el estado de los insumos que están al alcance de sus hijos, por lo que parte de la responsabilidad cae en las autoridades escolares, ya que son ellas las que permiten el ingreso y reciben las cuotas.
“Los padres de familia tienen derecho a opinar, tienen derecho a sugerir empresas o proveedores, así como también ser partícipes en la venta de comida en escuelas para asegurarse de la sana alimentación de sus hijos”, finalizó.