Esta semana arranca el proceso de rehabilitación

Prevén apuntalar Línea 12 del Metro con metal y fibra de carbono

Por recomendación del Comité Técnico Asesor, la parte colapsada debe ser reconstruida y el resto del tramo elevado tendrá un reforzamiento; en el túnel no ven algún riesgo

La zona cero se mantiene resguardada sólo por unas vallas metálicas, mientras sigue la investigación.
La zona cero se mantiene resguardada sólo por unas vallas metálicas, mientras sigue la investigación. Foto: Cuartoscuro

Esta semana arrancará el proceso para la rehabilitación de la Línea 12 del Metro, que considera la reconstrucción de la parte colapsada y el reforzamiento del tramo elevado, mediante un sistema de apuntalamiento metálico, con topes sísmicos auxiliares y reforzamiento de columnas de concreto con recubrimientos de fibra de carbono.

El Gobierno de la Ciudad de México indicó que los trabajos se llevarán a cabo a partir de las recomendaciones realizadas por el Comité Técnico Asesor (CTA) para el refuerzo y rehabilitación de la línea, en las que señalan que la parte colapsada debe ser reconstruida y el resto del tramo elevado tendrá un reforzamiento.

En cuanto a la parte subterránea, el comité recomendó la renivelación y realineación de la vía. Y ante el hallazgo de filtraciones, desazolvar los cárcamos y restituir los sistemas automatizados correspondientes con equipos de capacidad adecuada; y de no ser posible el desazolve, piden considerar la sustitución del material base por un material menos susceptible al agua.

Los primeros trabajos de rehabilitación consisten en la elaboración de estudios topográficos y geométricos.

Además, se alista la firma de una serie de convenios con las empresas Alstom, ICA y CAF, involucradas en la construcción de la Línea Dorada, con el fin de que éstas realicen los trabajos, expuso la Jefa de Gobierno local, Claudia Sheinbaum.

Lo más importante, explicó, es que las intervenciones se realicen con base en las notas entregadas por el Comité Técnico y con el desarrollo de algunos proyectos ejecutivos más detallados que también deben iniciarse, para garantizar la operación segura de la línea.

  • El dato: Se recomendó atender las filtraciones de agua en la parte del túnel mediante impermeabilización, captación y conducción de agua, así como inyecciones en las uniones de las dovelas.

CON TRES VIGAS

Jesús Esteva, titular de la Secretaría de Obras y Servicios, expuso que, a raíz del colapso del claro en el tramo elevado de la línea, conocida como la Zona Cero, el Comité Técnico Asesor (CTA) efectuó visitas técnicas, revisó la documentación del proyecto L12 y la información pública sobre el colapso.

A partir de la información obtenida, el CTA desarrolló cuatro cartas técnicas con opciones de tipo conceptual, para la reconstrucción del claro colapsado y para el reforzamiento del resto del tramo elevado de vigas metálicas. También emitió medidas enfocadas al túnel.

Como resultado de los análisis y estudios, el CTA recomendó la reconstrucción del tramo colapsado, con base en tres vigas metálicas, tipo cajón, y un sistema de piso prefabricado unido con secciones canal, soldadas al patín superior de las vigas.

Explicó que el CTA revisará el tramo gemelo y evaluará la necesidad de reforzarlo o, en su caso, sustituirlo, esto con previa autorización de la Fiscalía General de Justicia de la CDMX. En tanto, habrá reforzamientos con apuntalamiento metálico en varios tramos rectos.

Del resto del tramo elevado, el comité recomendó obtener muestras alteradas e inalteradas del balasto, para efectuar los ensayos de laboratorio correspondientes y verificar su estado.

“Dependiendo de los resultados de los ensayos, se determinará la necesidad de cambiar dicho balasto”, dijo.

El CTA recomendó la renivelación y realineación de la vía; sustitución de durmientes de madera por concreto en aparatos de vía; también la inspección de los durmientes de madera de los aparatos de vía, para que aquellos que se encuentren deteriorados sean sustituidos por unos de concreto.

En lo que respecta a la parte subterránea, no se encontró evidencia de que el túnel esté sujeto a riesgo de daño o colapso estructural, ni en el corto ni en el largo plazo; sin embargo, se constató la presencia de agua en diversos lugares, producto de filtraciones de distintas intensidades, así como deficiencias en el sistema de drenaje.

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