Vecinos de la colonia Irrigación, en la alcaldía Miguel Hidalgo, avalaron ayer los acuerdos a los que llegaron las autoridades de la Ciudad de México y la Embajada de Estados Unidos en nuestro país para la tala de 79 árboles en los alrededores de la nueva sede diplomática, localizada en esa demarcación.
Durante una asamblea vecinal que tuvo lugar este domingo, en el perímetro de la que será la nueva sede, los vecinos expusieron que se acordó la plantación de 60 árboles adicionales a los que se tenían contemplados en un principio, los cuales deberá mantener la Embajada.
También se acordó que se hará uso de la madera de los árboles talados para construir mobiliario urbano para la colonia y se habló de la posibilidad de crear un parque público en uno de los terrenos de la representación diplomática.
Estos acuerdos se establecieron durante una reunión que sostuvieron autoridades de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) y representantes de la Embajada de Estados Unidos, la cual tuvo lugar el pasado viernes. Y ayer fueron ratificados por los vecinos de la colonia Irrigación.
Ruth Gradilla, presidenta de la Comisión de Participación Comunitaria, recordó que el pasado 27 de agosto, cuando vecinos de la colonia alertaron por la tala de árboles que inició en plena madrugada, los inconformes solicitaron tres asuntos: “ni un árbol más, la revisión de los permisos (para cortar los árboles) y la construcción de mesas de trabajo con los vecinos de la colonia”, lo cual se cumplió.
La tala de árboles en los alrededores de la nueva sede de la Embajada,en el número 225 de la calle Presa la Angostura, causó indignación entre los habitantes de la zona, quienes denunciaron la acción como un “ecocidio”, por lo que pidieron apoyo a las autoridades.
Tras la inconformidad de la ciudadanía, la Sedema dio a conocer que la Embajada de Estados Unidos obtuvo en su momento todos los permisos para la construcción del nuevo edificio.
Dicho proyecto, autorizado por las autoridades capitalinas en abril del 2015, contemplaba el derribo de 122 árboles, los cuales serían restituidos con la plantación de nuevos ejemplares y un pago al Fondo Ambiental Público del Distrito Federal.
De esta forma, la Embajada debía realizar la plantación de 376 árboles en las áreas verdes que se crearán al interior del inmueble.
Sin embargo, luego de la reunión del pasado viernes 9 de septiembre, la Embajada acordó “incrementar el número de árboles a ser plantados en las partes externas de la obra”, de acuerdo con un comunicado que emitió este fin de semana la Sedema.
Por ello, además de los 376 árboles que se tenían contemplados, la Embajada se comprometió a plantar 60 árboles “maduros y de gran talla” en los alrededores del inmueble. Además, se deberán respetar siete ejemplares que están ubicados en la calle Presa de las Vírgenes.