El desarrollo urbano de la Ciudad de México se extiende cada vez más, lo cual se refleja en el constante anuncio de nuevos complejos inmobiliarios, plazas comerciales y unidades habitacionales, las cuales expanden la “mancha urbana” de la zona metropolitana.
A causa de esto, tanto la Ciudad como otras regiones de la Zona Metropolitana del Valle de México han estado marcadas durante décadas por protestas en contra de este crecimiento. Sin embargo, particularmente se ha vuelto más relevante la discusión, a causa de que la ciudad enfrenta una problemática de abasto de agua.
Protestas por complejos inmobiliarios, en crecimiento
A inicios de año, adquirieron relevancia las protestas de vecinos por el caso de la megaobra “BeGrand”, ubicada en los terrenos donde antes se asentaba el Casino San Ángel, cerca de la Plaza Santa Teresa.
Por este complejo, los vecinos de la zona acusan que, debido a la densidad de la población, la construcción representaría un grave impacto urbano y ambiental en la zona.
“Son proyectos multifamiliares que se pretenden construir sin haber dado antes solución al problema que ha venido arrastrando la colonia, que es el tema de la movilidad y el agua potable”, dijo en enero Juan Carlos Obregón, abogado de los vecinos, a La Razón.
Por ello, según el defensor, los vecinos están recurriendo a todas las instancias legales necesarias para frenar el avance de la construcción, de la misma forma en que se encuentran exigiendo diálogos con las autoridades correspondientes.
Así han sido las protestas de vecinos por desarrollo Mantik Pedregal
Otro complejo que ha generado molestia entre los vecinos es el del complejo Mantik Pedregal, el cual ha sido objeto de críticas entre los vecinos a causa de, nuevamente, el impacto urbano y ambiental que prevén, así como el presunto descuido de una zona arqueológica encontrada cerca.
En reportajes de la prensa nacional, divulgados en medios digitales el pasado 14 de abril, se atestiguan protestas, en las que se clausura simbólicamente la construcción en descontento por la misma.
Aquel día, los pobladores de las citadas regiones se unieron con habitantes de Xoco y Santa Úrsula Coapa, quienes marcharon desde las 10:00 horas para pegar letreros con la leyenda “Clausurado”, a la vez que cargaban letreros en donde manifestaron su descontento por el avance del complejo inmobiliario.
Los manifestantes acusan que la construcción de las torres del complejo Mantik Pedregal afectará el vaso regulador del río Magdalena, lo cual podría impactar negativamente en el abasto de agua en las colonias circundantes.
Además, denunciaron que en el predio hay un sitio arqueológico en el que se encuentra un basamento piramidal prehispánico que, según documentos, data de 1934, y que no se están tomando los cuidados necesarios para proteger el monumento hallado.
Del mismo modo, durante aquella manifestación, los pobladores acusaron que han solicitado diálogos tanto con el Gobierno capitalino como con el Instituto Nacional de Antropología e Historia, pero que no han obtenido respuesta.
¿Qué han dicho las autoridades sobre el caso de los complejos inmobiliarios?
Los vecinos acusan que no han recibido respuesta ni disposición del diálogo por parte de las autoridades. Sin embargo, el pronunciamiento más reciente vino de Giovani Gutiérrez, alcalde de Coyoacán, quien se negó a enviar una opinión positiva al Congreso capitalino sobre el proyecto BeGrand.
AM