El cuerpo humano y la transformación que sufre al atravesar las diferentes etapas de la vida, son objeto de la exposición Bronce y Sedimento, del escultor Jorge Marín, la cual se presenta en la ciudad de Pachuca.
La instalación que se puede apreciar en el Museo Cuartel del Arte, en la capital hidalguense, conduce a una reflexión en torno al cuerpo humano, evoca sus distintos momentos y algunas situaciones.
Ancianas, niños y personajes que expresan los límites de sus organismos son los protagonistas de esta instalación en la cual se muestra la belleza de ver el cuerpo con toda su crudeza y fulgor.
Para el artista el cuerpo es “receptor y emisor de emociones, ideas y sensaciones, nuestro contacto principal con el entorno, en una relación que va más allá del intelecto”, asegura.
Nueve piezas —5 cerámicas y 4 bronces— muestran ese universo “tan desconocido y secreto, tan ajeno cotidiano, que es nuestro vehículo y contenedor, y que con frecuencia olvidamos que nos pertenece”, destaca.
En esta exhibición se narra el tránsito de la piel al polvo que hace arcilla y, como arcilla, vuelve a modelarse. Sedimento de cerámica, molde para bronce: Bronce y Sedimento, explica en un comunicado el Estudio Jorge Marín, quien también realizó el trabajo curatorial.
Esta muestra es la otra faceta del michoacano quien ha recibido el reconocimiento nacional e internacional por trabajar en distintas dimensiones escultóricas, que van de la miniatura a lo monumental.
Sus obras de gran formato se han apoderado del espacio público en México y países como China, Estados Unidos donde han generado un diálogo inédito entre la obra de arte y el espectador, Además de desarrollar un diálogo espontáneo y lúdico como el que ha establecido con sus Alas de México, la cual ha sido vista y disfrutada por miles de personas.
Las obras de Bronce y Sedimento forman parte del programa Pago en Especie de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, en el que los artistas de México, pueden cumplir con sus obligaciones fiscales con parte de sus creaciones, las cuales van conformando un acervo nacional que da cuenta del trabajo desarrollado por los autores del país.
Este programa también busca difundir el patrimonio artístico y al mismo tiempo conservarlo como un bien de los mexicanos.
Bronce y Sedimento comparte el espacio del Museo Cuartel del Arte con la muestra Enigma del artista plástico Benjamín Domínguez, quien ofrece una antología visual de su delicado y elegante manejo de técnica y colores.
Sus imágenes cargadas de detalles fantásticos son acertijos que buscan ser descubiertos por los ojos de los asistentes.
Domínguez inició su carrera como pintor abstracto, sin embargo su verdadera pasión ha sido realizar una revisión posmoderna del barroco.
Ahora es respetado como uno de los neoclasicistas más modernos del país.
A los 20 años de edad ingresó a la Academia de San Carlos en la Ciudad de México, donde estudió grabado con Francisco Moreno Capdevilla, y pintura con Roberto Garibay, Héctor Cruz, Nicolás Moreno y Antonio Rodríguez Luna.
