“Love is in the air” el 14 de febrero. Más parejas se dejan ver por la calle, caminan de la mano sosteniendo chocolates, flores o enormes globos rojos en forma de corazón que recibieron como obsequio el Día de San Valentín. Sin embargo, detrás de ésta celebración romántica, cuyo origen data del siglo III, hay una historia no tan amorosa.
Esta conmemorativa fecha lleva el nombre de San Valentín de Terni, quien fue un obispo que nació en Interamna (lo que hoy es Terni, ubicado a 100km al norte de Roma) y fue Consagrado por el Papa Victor I en el año 197.
[caption id="attachment_700942" align="alignright" width="696"] (Foto: Cuartoscuro)[/caption]
De acuerdo con la tradición, San Valentín arriesgaba su vida para casar a las parejas en los tiempos de persecución durante el imperio Romano de Claudio II, conocido como El Gótico, pero según una publicación de la Arquidiócesis de Morelia, el emperador comprendió que las enseñanzas del obispo podrían resultar peligrosas para el orden de la ciudad así que ordenó que fuera juzgado estrictamente según las leyes.
Valentín potenciaba el matrimonio entre los soldados romanos, sin embargo en esos momentos el imperio buscaba que sus militares no tuvieran ataduras para poder servir mejor. Cuando Claudio II se enteró de las prácticas del San Valentín, lo sentenció a muerte el 14 de febrero del año 270 por desobediencia.
Según la Agencia Católica de Informaciones San Valentín fue decapitado en secreto para evitar la reacción del pueblo de Terni donde era muy amado.
Pero la conmemoración al santo inició oficialmente el 14 de febrero del año 494 cuando el Papa Gelasio I incluyó la festividad al calendario litúrgico tradicional y fue celebrada por la Iglesia católica en los siguientes 15 siglos.
[caption id="attachment_700939" align="alignleft" width="696"] (Foto: Cuartoscuro)[/caption]
Para el siglo XIX la celebración de la fecha era muy popular tanto que en Reino Unido ya se ofrecían tarjetas de San Valentín fabricadas en masa. Mientras que en América se le atribuye a Esther Howland ser la pionera de las tarjetas.
Ella se inspiró en diseños de Reino Unido y para realizar sus propias creaciones importaba de Inglaterra el material a Estados Unidos.
Con el paso del tiempo la celebración no ha perdido su popularidad, pues al menos en México el 44 por ciento de las personas asocia el 14 de febrero con el amor y la amistad y festeja el día, lo que genera un aumento en las ventas en chocolates, dulces, vinos y fragancias, señala un estudio de la empresa Nielsen.
srv