El Centro Cultural Universitario Tlatelolco (CCUT) y el Museo Casa de la Memoria Indómita acordaron digitalizar y catalogar una amplia selección de documentos, entre fotografías, mantas originales de protesta, folletos, carteles y panfletos, de la activista Rosario Ibarra de Piedra, del Comité ¡Eureka! y del Frente Nacional contra la Represión.
El archivo formará parte del acervo M68. Ciudadanías en Movimiento, una colección digital de documentos, fotografías, testimonios y audiovisuales sobre los movimientos sociales, políticos, económicos y culturales, que de 1968 a la fecha han contribuido a generar conciencia ciudadana.
El anuncio lo realizó en conferencia de prensa Jorge Gálvez, integrante fundador del Comité ¡Eureka! y director del Museo Casa de la Memoria Indómita.
En el evento estuvo también Ricardo Raphael, director del CCUT; Sandra Lorenzano, subdirectora de Vinculación y Comunidades del CCUT, y Ander Azpiri, subdirector Académico del CCUT.
La documentación que se encuentra bajo el resguardo del Museo Casa de la Memoria Indómita, preserva y difunde carpetas con miles de documentos originales, comunicados, cartas, fotografías y objetos relacionados con la práctica de la desaparición forzada en México y otros crímenes de lesa humanidad, precisó Gálvez.
El archivo, agregó, posee información de tres fondos principalmente: el del Comité ¡Eureka!, una organización de madres conocidas como Las Doñas y familiares de desaparecidos, debido a la persecución o detención ilegal de integrantes de movimientos políticos y sociales.
Así como el Fondo del Frente Nacional contra la Represión y el Fondo de Rosario Ibarra de Piedra, madre de Jesús Piedra Ibarra, integrante de la Liga Comunista 23 de Septiembre, detenido y desaparecido desde el 18 de abril de 1975.
En su intervención Ricardo Raphael dijo que el propósito de la colección M68, es difundir los actos de corrupción, de violencia y de autoritarismo, a través de fotografías, imágenes, documentos o expedientes para mostrar las cosas como fueron y combatir la impunidad.
“Tarde o temprano esa colección de memoria, de pedazos de memoria permiten entender lo que sucedió, encontrar a quienes desaparecieron y lo que perdimos. Ese es el esfuerzo principal que la UNAM, a través del Centro Cultural Tlatelolco emprende para conmemorar los 50 años del 68”, explicó.
En tanto, Sandra Lorenzano dijo que una de las armas más poderosas para combatir el olvido es la memoria.
“Contra los traficantes del olvido, la memoria es el espacio simbólico donde cuidar a nuestros muertos, donde ir a conversar con ellos, o a llorarlos, o a todo eso al mismo tiempo”
Sandra Lozano
Subdirectora de Vinculación y Comunidades del CCUT
Además dijo que ante los más de cien mil muertos y más de treinta mil desaparecidos en nuestro país, “los rostros de las Doñas son más que nunca una bandera, símbolo de lucha, resistencia, de amor”.
Ander Azpiri explicó que la colección M68 permitirá entender las movilizaciones sociales en México durante los últimos 50 años y será una fuente primordial de corte académico y otro tipo de investigaciones orientadas a la búsqueda de la verdad.
“Vamos a ofrecer una plataforma para acceder a estos objetos que serán legibles en cualquier otra plataforma digital. Lo que estamos haciendo con estas estrategias de preservación digital es mantener la memoria y ayudar a la conservación de estos documentos durante el mayor tiempo posible”, dijo.
La plataforma tendrá sistemas que permitirán a cualquier usuario encontrar información que no sabe que existe, gracias a sistemas de reconocimiento facial en las fotografías, de asociación de contenidos en los distintos documentos y de interacciones particularizadas con cada usuario, anunció Azpiri.
Durante la firma del convenio estuvieron presentes como testigos Maria Concepción Ávila González y Prisciliana Chávez Hoyos, hermanas de desaparecidos y fundadoras del Comité Eureka.
fgr