Federico García Lorca, es uno de los ejemplos más claros de lo mencionado, con especial intensidad en el transcurso del siglo XX. Este cinco de junio se conmemoran 120 años del nacimiento de quien es recordado por su obra poética pero también por su afortunado acercamiento a la dramaturgia.
Desde muy joven mostró inquietud por el mundo del arte y las letras, la cual se empezó a convertir en su modo de vida cuando comenzó a estudiar Filosofía y Letras, así como Derecho, en la Universidad de Granada en 1915.
En los terrenos de la dramaturgia García Lorca no deja atrás lo realizado en sus poemarios, más bien podría decirse que sus obras de teatro son su otra forma de hacer poesía. Es decir, sus poemas tienen esa musicalidad que los hace cercanos más allá del discurso poético.
Muchos son los ejemplos que se pueden poner de esto tales como los célebres poemas: La casada infiel, Romance Sonámbulo y La sangre derramada, únicamente por mencionar algunos de los escritos que más adelante serían incluso musicalizados por muchos artistas. Las mujeres en sus escritos teatrales, están presentadas en toda su belleza y profundidad no exenta de lo trágico.
La casa de Bernarda de Alba y Yerma son muestras de lo mencionado y han sido representadas miles de veces en muchos países del mundo. El trabajo del poeta español tuvo un giro radical tanto por su cercanía al surrealismo como por su visita en 1929 a Nueva York. Es así que surgió el libro Poeta en Nueva York, símbolo y ejemplo de las vanguardias de aquellos años.
Perteneció a la que fue llamada generación del 27, a la que también pertenecieron otros grandes escritores como Rafael Alberti, Luis Cernuda y Pedro Salinas quienes estuvieron unidos sobre todo por mezclar en sus trabajos lo popular y lo experimental.
Luego de una vida intensa y productiva, finalmente el 18 de agosto de 1933 en la madrugada, el poeta español fue fusilado como producto del golpe de estado de lo que sería la dictadura de Francisco Franco.
Entre otras cuestiones se le acusó por su homosexualidad, así como por sus inclinaciones políticas que iban de la izquierda hacia el anarquismo. Posteriormente sus restos fueron ocultados sin que hasta el momento se conozca su paradero exacto pero su obra sí que está muy bien identificada y perdura en el gusto de los lectores quienes se sienten interpelados por el decir de uno de los grandes poetas del siglo anterior.
ntb