Por Adriana Góchez
Con danzas prehispánicas y la revelación de una placa conmemorativa, este martes diversas agrupaciones festejan los 500 años de la Noche Triste, en el emblemático ahuehuete ubicado en Popotla, donde se cree que Hernán Cortés lloró tras ser derrotado por los mexicas.
Aunque antes de la pandemia de COVID-19 se esperaba la asistencia de dos mil personas, sólo acudieron cerca de 300, que portaban cubrebocas, y en la medida de lo posible, guardaban su sana distancia, pues aunque se acordonó la zona, algunos de los que observaban el evento rompían la regla.
“En otras ocasiones hemos tenido una afluencia de mil 500 a dos mil personas. Cuando fue la fundación de México-Tenochtitlán, todo mundo acudió. Cuando hay una fiesta como la de hoy, hay mucha convocatoria, pero esta vez restringimos un poco la asistencia por la pandemia”, detalló a La Razón, Marisela Ugalde Velázquez de León, cihuacoatl del Supremo Consejo Indígena Pluricultural.
Sólo se permitió que estuvieran danzantes y organizadores. El evento se transmite vía Facebook, pero hubo uno que otro vecino que se dió cita en el también conocido como Árbol de la Noche Victoriosa.
Desde las 9:00 horas comenzó el evento con unas palabras de bienvenida y posteriormente se comenzaron a interpretar danzas prehispánicas, los bailarines de diferentes calpullis también portaban cubrebocas y guardaban su distancia.
A medio milenio de la Noche Triste, refrendaron la victoria de los mexicas. “Este día es muy importante porque se marcó el poderío guerrero mexica y la entrega de México-Tenochtitlan que fue una entrega pactada cósmica y humanamente”, señaló Velázquez de León.
Velázquez de León recordó que hace 500 años también en el territorio azotó una pandemia. “Cinco siglos después de repite. Aceptamos este cubrebocas, este encierro, esta sana distancia porque sabemos que es un signo del resurgir de nuestra cultura”, expresó.
A las 13:00 horas se develó una placa conmemorativa por los 500 años de la Noche Triste, acto que estuvo acompañado por un ritual.
“Quiero reconocer la asistencia de los presentes, porque no obstante de la pandemia, nuestro compromiso con el pueblo nos ha permitido estar en esta celebración. Para nosotros es una noche de festejo”, dijo Carlos Luciano Gutiérrez, antes de develar la placa.
Posteriormente, los danzantes continuaron con sus presentaciones y aseguraron que estarán al pie del Árbol de la Noche Triste hasta “que el cuerpo aguante”.
Como parte del evento también se organizó una carrera que partió desde el Cerro de la Estrella y que tendrá como fin la llegada al famoso ahuehuete de Popotla.
Los organizadores esperan que en 2021 puedan conmemorar esta fecha en grande en este emblemático árbol.