Cuatro niñas apasionadas del beisbol comienzan una lucha por recuperar el parque donde solían jugar, pues será convertido en un centro comercial.
Así es la historia de Bolita por favor, puesta en escena que concientiza sobre la pérdida de los espacios públicos, a raíz de la vorágine de construcciones inmobiliarias en las grandes ciudades., e invita a las infancias y juventudes a luchar por sus derechos.
Con esta obra, Valentina Sierra, la directora, rememora el Parque del Seguro Social, lugar de su infancia que fue transformado en Parque Delta. “Ésta es mi manera de dar la pelea de una manera poética para que esos espacios no se sigan perdiendo”, señaló.
Para la dramaturga, Bolita por favor es una manera de acercar a las infancias y juventudes a la política, de una manera divertida y lúdica. “No importa la edad, uno puede empezar a luchar por sus derechos”, dijo.
“Hay que enseñarles que su voz es importante y qué mejor que hacerlo contra este monstruo que es el desarrollo urbano plagado de corrupción. Que vean en la desobediencia una herramienta válida”, resaltó.
En la puesta en escena, que se presenta de manera gratuita en la Panza de la Danza, del Centro Nacional de las Artes, el público interactúa y todo está ambientado como un estadio de beisbol.
“Desde que la gente llega hay música, que hace el ambiente de un juego de beisbol. Están las narraciones de Agustín Castillo, la voz oficial de los Diablos Rojos; y la escenografía son rejas, porque representan este encierro y al estadio”, detalló.
“Las cuatro niñas están encerradas en un edificio, entonces, vemos mucha identificación con el confinamiento. Aquí se defiende el derecho que tiene la infancia a un espacio lúdico”, finalizó.
