Publica "Te comeré el corazón"

Asbel Hernández cuestiona el concepto tradicional de familia en libro de relatos

En “Te comeré el corazón”, de Asbel Hernández, uno de los personajes se pregunta: ¿Quién dijo que la familia es el mejor lugar para crecer?

La autora Asbel Hernández cuestiona a la familia tradicional en su libro "Te comeré el corazón". Foto: Especial

"Te comeré el corazón" (Casa Editorial Abismos, 2021), de la escritora mexicana Asbel Hernández: cuaderno conformado por diez relatos en que el concepto tradicional de la familia se cuestiona a partir de tramas que hacen referencias sobre todo, a la maternidad en un despliegue de acciones dramáticas protagonizado por lealtades, dependencias, fingimientos y enervados afectos.

“Una prosa despiadada que es capaz de colocar en la superficie de una letra, de cualquier palabra, de una frase trivial, todo el dolor que acompaña al verdadero amor. Al amor por un hombre, al amor de una madre, al amor de una hija, al hambre del amor. Desfile de todos los destinos posibles enfrentados a las tristes fuerzas de poder que se ponen en juego al interior de la familia”, ha dicho la novelista María Esther Núñez sobre este volumen de provocadores índices e inestabilidades sustentadas en falsos esquemas de la querencia entre padres e hijos.

"Te comeré el corazón", libro alejado de cualquier conmiseración: la autora explora en las espirales que circundan los recodos de ese ámbito aparentemente cordial, pero imbuidos en terribles consonancias. “Todas las familias felices se parecen unas a otras, pero cada familia infeliz lo es a su manera”, nos dice Tolstói en el inicio de "Ana Karenina", una novela que Asbel Hernández ha leído con detenimiento.

  • Autor: Asbel Hernández
  • Género: Cuento
  • Editorial: Abismos, 2021

“Este nuevo libro surge de una de mis obsesiones y temas recurrentes en mi escritura: la oscuridad que se acuna en las familias, en cada integrante que la conforma y las posibilidades de ser algo más allá de lo que se pretende, nuestros alcances como humanos en ese núcleo tan sobrevalorado: la familia. Uno de mis personajes se pregunta: ¿Quién dijo que la familia es el mejor lugar para crecer?”, expresó en entrevista telefónica con La Razón, Asbel Hernández.

La autora del libro Asbel Hernández. ı Foto: Cortesía Asbel Hernández

¿Cómo se materializa este cuaderno de relatos? El libro surge al darme cuenta de que los relatos sobre maternidades oscuras se hacían más frecuentes; entonces, le propuse a mi editora, aventurarnos a conformar el libro que hoy tenemos como objeto. Son diez relatos, cinco de ellos llevan nombre de mujer: "Rebeca", "Helena", "Cecilia", "Azucena", "Elaine" y el resto diversos títulos: "El patio interior", "Labios de granito", "Todo está bien", "Segunda muerte" y el que da título al libro: "Te comeré el corazón".

¿Rótulos muy inquietantes? Cada título fue pensado para que fuera parte de cada relato, así como los epígrafes que abren cada historia. El tema de la Maternidad, como diría María Esther Núñez, está jugado en el libro entero, desde las dependencias, lealtades, añoranzas, mentiras, el falso amor, la incondicionalidad del amor maternal se cuestiona, se tensa, se le da la vuelta.

¿Hilo conductor en torno a episodios de mujeres? Lo que une a estas historias es que se habla de mujeres, pero de mujeres en situación, como apunta el narrador Rodrigo Garnica en una reciente reseña: “la situación de la amante que es señalada inquisitorialmente por su propia madre, la situación de una esposa que sospecha que el marido ama a otra y al mismo tiempo se obsesiona con la historia del suicidio de una poeta, otro más en que la madre del personaje puede ser una condena hasta que forma una familia por elección, los amigos; una madre ligeramente incestuosa que despierta un soterrado horror en su hijo”.

Portada del libro. ı Foto: Especial

¿Referencias a los mitos griegos protagonizados por mujeres? "Te comeré el corazón" es una propuesta que pone sobre la mesa una realidad que se convierte en tragedia, una paráfrasis de un clásico pero llevado a un contexto actual; la Medea de Sófocles encarna a una Melisa que le come figuradamente el corazón a su pareja dándole un golpe donde más puede lastimarlo: en sus hijos. Son los clásicos quienes nos muestran aquellas posibilidades humanas que insisten en nuestro presente y la idea sobre lo que podemos a llegar a hacer y ser.

¿Explora usted el universo de familias difuncionales? ¿A quiénes importan las historias de las familias felices? A mí, no; las de las infelices me atraen sin duda porque marcan una diferencia y son más atractivas, o como lo diría Tolstoi cada familia infeliz lo es a su manera y las felices se parecen unas a otras. La diferencia y la complejidad humana es lo que me importa explorar, aquello en lo que sin duda me reflejo, me identifico, conozco y a veces me horroriza de tan cercano que lo tengo.

¿Quién realizó el sugerente y simbólico diseño de la portada? Las delineaciones de la portada fueron realizadas por la artista Evelyn Alarcón. El libro está cobijado por el rojo corazón en color y título; un árbol otoñal al que vemos con sus raíces, aquello que está debajo de la tierra y no se ve, salvo rompan una banqueta; esas raíces son una metáfora de lo que también somos como humanos, eso que no se ve pero que forma parte de nosotros; esas raíces se convirtieron en venas, arterias y surgió entonces ese árbol-corazón con todos sus vasos comunicantes.

AG

Temas: