La escritora Almudena Grandes, quien falleció ayer a los 61 años de edad por complicaciones del cáncer que padecía, es despedida este domingo en Madrid, España.
Distintas personalidades del ámbito de la cultura, el espectáculo y la política han ido a darle el último adiós en la sala 17 del Tanatorio de La Paz (Tres Cantos), antes del entierro de mañana en el Cementerio Civil de Madrid.
Entre los asistentes se encuentran el cantante Joaquín Sabina, los editores Chus Visor, Miguel García Sánchez y Ángeles Aguilera; los escritores Marta Sanz, Domingo Villar, Ian Gibson y Benjamín Prado. La periodista Montserrat Domínguez. Además de Ana Belén y Víctor Manuel.
De acuerdo con reportes de El Mundo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, llegó entre los primeros: "Su aportación intelectual ha hecho de nuestro país un lugar mejor, con el que estaba tan comprometida", comentó.
También acudieron los directores de cine Mariano Barroso, Charly Arnaiz y Alberto Ortega. Los poetas Luis Muñoz, Raquel Lanseros, Fernando Valverde, José Ramón Ripoll, Joaquín Pérez Azaústre, Martín López Vega (director de gabinete de Dirección del Instituto Cervantes), Ernesto Pérez Zúñiga y Diego Doncel, por mencionar algunos.
Grandes era uno de los máximos referentes de la literatura española. Estuvo comprometida con la memoria de España al escribir acerca de la época franquista.
El ministro de Cultura, Miquel Iceta, la recordó hoy por su “compromiso con el feminismo y la recuperación de la memoria”, dijo, de acuerdo con reportes del diario El País.
Mientras que el político Ángel Gabilondo, amigo de Grandes, la destacó por ser "de las que abren espacio en la historia de la literatura a los olvidados, a los supervivientes, de las que hacen imprescindibles a aquellos seres aparentemente insignificantes pero decisivos”.
El cantante Joaquín Sabina se sentó junto al féretro de su gran amiga. Al llegar comentó a la prensa: “Estaba seguro de que nos iba a enterrar a todos porque era una fuerza de la naturaleza. Pero ahí nos quedan sus libros".
Por su parte, el cineasta Montxo Armendariz resaltó: “Su escritura servía para entendernos mejor y ahí nos queda. Pero echaremos de menos su coraje, su pasión y sus ganas de vivir”.
KEFS