No hace falta presentar a Jorge Volpi (Ciudad de México, 1968), una de las voces más significativas dentro del actual panorama de la literatura latinoamericana. Narrador y ensayista reconocido con varios galardones internacionales: Premio Biblioteca Breve, 1999 (En busca de Klingsor); Premio Debate-Casa de América, 2009 (El insomnio de Bolívar); Premio Planeta-América, 2011 (La tejedora de sombras) y Premio Alfaguara, 2018 (Una novela criminal), entre otros galardones.
Después de cuatro años de ‘pausa novelística’ aparece Partes de guerra (Alfaguara, 2022), donde el autor de Mentiras contagiosas (Premio Mazatlán, 2008) explora las recónditas y sombrías plazas de la violencia en nuestro país. Thriller policíaco que indaga en el asesinato en la frontera sur de una adolescente de 14 años, ejecutado por otros niños (la prima de la víctima y el novio de ésta) en presencia de dos menores de ocho y diez años. El neurocientífico Luis Roth, obsesionado con el caso, convence a un grupo de colegas a participar en una averiguación clínica con el objetivo de saber qué pasa en los cerebros de infantes convertidos en criminales.
“Esta novela, resultado de mi interés por la neurociencia, ya lo he manifestado en otros libros. Desde hace tiempo tenía la intención de escribir una novela protagonizada por neurocientíficos. Siempre me ha intrigado el tema aterrador de niños y adolescentes que poseen la capacidad de matar, asunto que no es privativo de México: ocurre en muchas partes del mundo. La prensa ha hecho eco de casos tristemente célebres en Gran Bretaña y Estados Unidos. ¿Cuáles son los factores que conminan a un niño a convertirse en asesino, y, asimismo, cuáles son los traumas que enfrenta?”, expresó en entrevista con La Razón Jorge Volpi, caballero de la Orden de Artes y Letras de Francia.
¿Pesquisa sobre los orígenes de la violencia y una reflexión en torno al quebranto de los afectos? Si alguna tesis se desprende, ésta gravita en un examen de los constituyentes genéticos, neurológicos y psiquiátricos presentes en la intimidación, hacia los migrantes, por parte del crimen organizado y del mismo Estado. Hay que ser conscientes de que las nefastas condiciones intrafamiliares y de género además otros factores sociales y de comunicación, determinan estos episodios terribles.
La narradora y los otros personajes escudriñan en la razón los orígenes de la violencia; pero se dan cuenta que estamos regidos por las turbacionesJorge Volpi, Escritor
¿La presentadora de noticias Mimí Barajas, alusión a un periodismo que maneja los temas de la violencia de manera imprudente? La novela también reflexiona y hace referencias a temas de la vida diaria como la falsedad, el afecto visto desde la carencia y la falta de mesura en algún tipo de periodismo. Mimí Barajas, presentadora de televisión, a quien le importa el rating. Es necesario un periodismo de investigación; sin embargo, prolifera lo superfluo y lo sensacionalista con claras intenciones distractoras de los hechos. Los medios manipulan y distorsionan los acontecimientos.
¿Por qué recurre usted a la neurociencia? Me interesaba, desde las coordenadas de la neurociencia, internarme en el poder de las emociones. La narradora y los otros personajes escudriñan en la razón los orígenes de la violencia; pero se dan cuenta que estamos regidos por las turbaciones, por ese corazón que “también tiene alas negras”, verso de Efraín Bartolomé que utilizo de epígrafe.
¿Índices de la procuración de justicia en México ya explorado en Una novela criminal? Sí, las investigaciones están mal estructuradas. El sistema de justicia, de gestión y procuración, no funciona. No hay un solo expediente en el que la pesquisa haya sido correcta en una búsqueda de evidencias.
¿Cómo fue el trabajo de configuración de esa voz femenina en primera persona? Es la segunda vez que incursiono en los índices de una voz femenina en mis novelas. Investigué entre mis colegas mujeres para encontrar el tono. La narradora protagonista, Lucía Spinosi siente afinidad por la joven culpable del crimen, lo cual la conlleva a revivir las encrucijadas de su pasado. Debía ser una mujer quien narrara la historia.
Partes de guerra
Por Jorge Volpi
Hundo las sandalias en el fango y me obligo a recordar aquel tres de agosto, siete meses atrás, cuando un par de salvadoreños se topó con el desvencijado cuerpo de una adolescente río abajo, o más bien quién era yo en ese mundo, en esa vida, cuando nuestro grupo de investigación se abría al futuro, nunca había escuchado hablar de ese puesto fronterizo, los malestares de la ataxia se habían recrudecido, mis afectos se escindían en líneas paralelas y tú aún no habías pronunciado los nombres de Saraí y Dayana (…)
Fragmento del libro.
- Autor: Jorge Volpi
- Género: Novela
- Editorial: Alfaguara, 2022