En Guanajuato, Guanajuato
Las sopranos María Katzarava y Hera Hyesang cautivaron en el concierto inaugural del 50 aniversario del Festival Internacional Cervantino, en una Alhóndiga de Granaditas, en Guanajuato, cuya explanada lucía totalmente llena e incluso en los alrededores la gente que no pudo ingresar vio el concierto.
La fiesta del espíritu comenzó a las 20:00 horas, entre gritos y aplausos del público. La Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México, bajo la dirección de Scott Yoo, dio inicio al recital con “Obertura” de El rapto en el serrallo, de Mozart. Los asistentes, entre los que se encontraban niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad, observaban a la agrupación expectantes.
Tras su ejecución subió al escenario la reconocida soprano coreana Hera Hyesang para interpretar “Ave María”, de la ópera Otello, de Verdi. Para la ocasión eligió un elegante vestido en color plata y rojo.
Después, la mexicana María Katzarava subió a la tarima para vocalizar “Pace, pace mio Dio…”, de La forza del destino, una de las arias con la que ha sido aclamada en México y las principales casas de ópera de Europa.
Qué hubiera sido si hubiéramos cancelado el Cervantino por la pandemia. En 2020 seguimos adelante por los canales públicos y plataformas digitales dónde no daremos marcha atrásMariana Aymerich, Directora del Festival Internacional Cervantino
El programa también incluyó arias de composiciones de Puccini, Mozart y Bellini. Las voces de las sopranos contrastaban logrando un concierto con diversos matices.
En una parte del concierto la vocalista Hera Hyesang, con su carisma y voz se llevó los aplausos de los presentes con su interpretación de “La tarántula…”, de La Tempranica, del compositor Gerónimo Giménez, la cual trató de cantar en español.
Después María Katzarava ejecutó “Carceleras…”, de Las hijas del Zebedeo, de Ruperto Chapí, en la cual impresionó con la potencia de su voz.
En la recta final del espectáculo, Hyesang y Katzarava cantaron juntas “Dueto, Barcarolle…”, de Los cuentos de Hoffmann, de Jacques Offenbach.
El final del concierto fue muy mexicano, María Katzarava cantó “Júrame”, mientras Hera Hyesang bailaba a su lado y expresaba con gestos lo desgarrador de este tema.
Al finalizar, el público gritó un contundente “¡Bravo!” y algunos se pusieron de pie. Las intérpretes aún tenían más sorpresas: “Todos nos deben acompañar porque no se pueden ir sin cantar”, dijo la soprano mexicana antes de vocalizar “Caminos de Guanajuato”, de José Alfredo Jiménez.
Los asistentes entonaron de principio a fin el tema y Hyesang interpretaba algunas estrofas en español.
Con “Mi ciudad”, en alusión al estado invitado la CDMX, el concierto concluyó. Los presentes se desbordaron en aplausos para las sopranos mientras un espectáculo de fuegos pirotécnicos.
COMIENZAN A LLENARSE LAS CALLES
Horas antes de que iniciara el Festival Cervantino en los callejones y plazas de la ciudad de Guanajuato ya comenzaba a verse la algarabía de la gente: jóvenes tomándose selfies con helados teniendo de fondo la joya arquitectónica, la basílica colegiata de Nuestra Señora de Guanajuato; turistas, principalmente de Estados Unidos paseaban por las calles y personas iban en busca de algún programa de mano del FIC.
En el centro también ya era visible el operativo de seguridad que se despliega con motivo del encuentro. Cuenta con mil 359 elementos y 140 unidades.
