Jorge Comensal es autor de Este vacío que hierve

Presenta una caótica CDMX con un Bosque de Chapultepec incendiado

El autor trata temas como el alcoholismo, la adicción a las redes sociales, el medio ambiente y la senectud; “quise abordar el tiempo como un torbellino que se expande a muchas direcciones”

Jorge Comensal, en una fotografía de archivo.
Jorge Comensal, en una fotografía de archivo. Foto: Cortesía: María Gómez de León/Alfaguara

El narrador y ensayista Jorge Comensal (Ciudad de México, 1987), después del exitoso debut novelístico con Las mutaciones (2016) —traducida a una decena de idiomas, elogiada por la crítica y fervoroso recibimiento de los lectores— lanza Este vacío que hierve (Alfaguara, 2022) ubicada en el año 2030: el Bosque de Chapultepec ha sido devastado por un extenso incendio que ha demolido también al Zoológico y al Panteón de Dolores (sitio donde están sepultados los padres de Karina, una joven especialista en Física Cuántica: coprotagonista de este relato geométrico y abrupto).

Trama de sigilosa ‘atmósfera detectivesca’ que incluye a la abuela de Karina, quien oculta algo sobre la muerte de los progenitores de ésta; Silverio, adicto a Internet, vigilante del Panteón Dolores: padre de la quinceañera Daenerys, defensora apasionada del medio ambiente. Comensal despliega con perspicacia diversos hilvanes temáticos desde un discurso narrativo vertiginoso y circundante: la senectud, la adicción al alcohol, el determinismo temporal, las redes sociales, elementos de la historia de México y otros engranajes esparcidos, los cuales se funden y conforman el nudo de una novela en que un pasado fantasmal encubre contratiempos perturbadores.

“Quise abordar el tiempo como un torbellino que se expande a muchas direcciones. Todo ocurre en un futuro próximo encajado en una temporalidad de un presente precipitado, incoherente y abrupto entretejido con las propensiones también caóticas de los personajes. El relator devela sus acciones; pero, al mismo tiempo, los espejismos presentes por los influjos de la televisión, YouTube, informes de noticias, rememoraciones, temas musicales...: personajes avistados por una borrasca de referencias. Creo que es un poco nuestra forma de habitar el mundo fragoso de hoy”, comentó en entrevista con La Razón, Jorge Comensal, también autor del ensayo Yonquis de las letras (2017).

¿Relato en que la dimensión del tiempo se trastoca? En cada capítulo la representación del tiempo es desigual: no hay un orden lógico de los hechos, los cuales se detienen, se adelantan o se retrasan. Algún crítico hablaba de “gravitación textual”.

¿Cuáles son las pretensiones de estos personajes asediados por furores? Karina está ansiosa por arribar al ‘futuro’ y descubrir el secreto que la abuela encubre; la abuela, por el alcoholismo que padece y la vejez, cree que su pasado es el presente; Silverio está embriagado por la Internet; Daenerys tiene la sensación de que el porvenir se calcina en su entorno, a su alrededor.

¿Narración marcada por los efectos, relaciones y secuelas de las redes sociales? Silverio, adicto a las redes sociales que explora los sitios más insólitos de Internet, es un reflejo de esas derivaciones. Aprovecho el extenso sumario de curiosidades (videos, datos enciclopédicos...) y algunas de ellas las describo en la novela como la masturbación de un delfín con un pez, por ejemplo.

¿Personajes que internamente habitan un ‘agujero efervescente’? Criaturas envueltas en faltas y privaciones que se agudizan por el incendio. Karina pretende aplacar las vicisitudes de su carencia afectiva en la exploración de la Física; la abuela intenta apagar las llamas de su secreto con el alcohol. Daenerys, alegoría de una generación que se siente desilusionada del futuro.

¿Daenerys es también una simbolización del compromiso que debemos asumir frente a la salvación del planeta? Tiene 15 años y está comprometida con el cuidado de los animales y el planeta. Sí, ella representa esa responsabilidad que debemos arrogarnos en la defensa de los ecosistemas de la maravillosa biodiversidad de la Tierra.

Este vacío que hierve (fragmento)
Por Jorge Comensal
5. Gravedad

¿De qué le sirve a Karina comprender tan bien la gravedad si no la puede domar cuando más lo necesita? El esfuerzo de arrastrar a su abuela por el pasillo la ha dejado exhausta y antes de hacer el intento de subirla a la cama toma un descanso mientras la anciana balbucea reclamos incoherentes con la cabeza apoyada contra el costado del colchón.

—Es la primera vez en toda mi vida, porque yo no te crié así para que me zangolotees, ¿quién, quién te crees que eres, niña?

Karina está segura de que el espaciotiempo no se curva por efecto de las masas sino que se difunde y arremolina como una gran marea de vacuidad.

—Oye —le dice a su abuela casualmente, tratando de relajarla para que le confiese quién vino a verla—, cuéntame cómo te la pasaste, de qué platicaron.

El vacío no es dócil. Se opone a los cuerpos que lo penetran. Por eso las galaxias se compactan y huyen, por eso la masa gravitatoria de su abuela se niega a dejar el suelo.

—Le dije que mejor así lo dejáramos, como si no hubiera pasado nada y ya. Muchas gracias, buenas noches.

Este vacío que hierve
Este vacío que hierve ı Foto: larazondemexico
  • · Autor: Jorge Comensal
  • · Género: Novela
  • · Editorial: Alfaguara, 2022