A finales de la década de los años 50 un barrio negro y latino de Nueva York fue destruido para edificar el Lincoln Center, el centro cultural más importante de Estados Unidos y que es sede de destacadas agrupaciones como la Metropolitan Opera o el New York City Ballet. Para honrar a esa comunidad que fue desplazada y exaltar la riqueza cultural de afroamericanos y migrantes que habitan en ese país, el colectivo Sydnie L. Mosley Dances presenta la pieza de danza-teatro PURPLE: A Ritual in Nine Spells, en cuyo elenco participa la bailarina mexicana Lorena Jaramillo.
La puesta en escena resalta la alegría, las estrategias de resiliencia y las tradiciones de la comunidad de San Juan Hill que fue desplazada para construir el Lincoln Center, con el fin de rendir homenaje a su cultura y visibilizar a quienes han luchado por sus derechos y han hecho comunidad. Se centra en rituales sagrados, honra la toma de decisiones colectivas y también se inspira en la poeta afroamericana feminista, Ntozake Shange.
“Lo que esta pieza quiere iluminar es decir, seguimos aquí, estamos haciendo arte, honrando a todas las personas que nos han abierto el camino para poder llegar a este escenario del Lincoln Center, estamos hablando de todo el conocimiento que nos han dado, tener un altar, a varias generaciones de mujeres en escena es honrar nuestros linajes, las partes de nuestra cultura que no se pueden matar y aplastar, que es la música, la danza, el arte, las historias orales.
“Es algo que la supremacía blanca no nos va a poder robar ni quitar, esa riqueza de nuestra cultura, es honrar eso y levantarlo, para ellas es la parte de ser afroamericanas, para mí levantar las voces de otros inmigrantes que luchan por mantener su cultura en Estados Unidos”, comentó en entrevista con La Razón desde Nueva York, la joven bailarina de 26 años Lorena Jaramillo.
El montaje une a artistas de distintas generaciones, entre ellas se encuentra la reconocida bailarina y coreógrafa Dyane Harvey, quien ha hecho un amplio trabajo para visibilizar a los afroamericanos a través de la danza.
“Somos performers mujeres de varias generaciones, soy la más joven, tengo 26 años, a través de esa diversidad generacional exploramos muchos temas, uno es la alegría, hemos tenido el beneficio de trabajar con muchas de las personas que fueron desplazadas para construir el Lincoln Center, siguen viviendo en el área, pero en unos edificios más lejos del centro de la ciudad, es un poco contar sus historias de resistencia, la manera en que mujeres encuentran resistencia, hermandad”, detalló Jaramillo.
Es honrar nuestros linajes, las partes de nuestra cultura que no se pueden matar y aplastar, que es la música, la danza, el arte, las historias oralesLorena Jaramillo, Bailarina mexicana
Presentar este montaje en el Lincoln Center para la bailarina es bastante significativo, porque se habla en español en gran parte de los diálogos que tienen las artistas y se representan tradiciones como los altares, que forman parte de una cultura que por muchos años quiso ser borrada.
“Mi personaje en la obra está basado en el hecho de que soy mexicana y migrante… ”, añadió Jaramillo, quien radica en EU desde los 18 años.
Cada vez más el Lincoln Center ha puesto el foco en la comunidad afroamericana y latina que fue desterrada de su barrio, muestra de eso es que en octubre del año pasado se estrenó una obra del compositor y trompetista de jazz Etienne Charles, quien hizo un recorrido por los sonidos de jazz, swing, funk y salsa de esas calles que quedaron enterradas por el centro cultural. Además de incluir en sus programas a artistas afroamericanos o latinos; o compañías que han centrado su trabajo en estas comunidades.
Para Jaramilllo esta inclusión es positiva; sin embargo, lamenta que estos cambios se estén dando por la repercusión que ha tenido el movimiento Black Lives Matter, que surgió a partir del asesinato de George Floyd.
“Una vez que se popularizó el Black Lives Matter e indignó la muerte de George Floyd nuestro nombre, Sydnie L. Mosley Dances, salió más, teníamos donaciones, más contrataciones, qué bueno que tenemos visibilidad en un colectivo integrado mayoritariamente por personas negras y mujeres de otras comunidades; pero el hecho de que las personas tienen que morir para que nos den atención, para que se les dé espacio a los artistas negros, no debería ser”, lamentó.
PURPLE: A Ritual in Nine Spells se presentará del 9 al 25 de junio como parte del festival Summer for the Ciy del Lincoln Center. Además del montaje, el público podrá admirar una instalación de arte multimedia que representa historias orales de adultos mayores en comunidades de San Juan Hill.