Entre la polémica y la aceptación

Raquel-IA y el debate sobre inteligencia artificial en el arte

Ya hay obras en subastas y exposiciones generadas con ese recurso; sus creadores y usuarios polemizan sobre si suplanta tareas o las potencializa

Nietzsche’s Twilight of the Idols, Raquel-IA usando compositor NX-V1, enero del 2022. Foto: Cortesía Marcelo Funes-Gallanzi, Helio Santos y Estudio San Martín

Raquel-IA, Ekphrastic Art es la primera artista virtual mexicana y única en Latinoamérica, creada con Inteligencia Artificial que permite a un usuario introducir un texto, poema o canción y a partir de éste generar una obra artística. Ha tenido tanto reconocimiento que ya ha participado en subastas, tuvo su primera exposición y está por presentar su próxima muestra, en medio de un debate que hay con respecto a piezas creadas con IA, un sector que no lo considera artístico y otro que lo está utilizando como una herramienta creativa.

Raquel-IA fue desarrollada por Marcelo Funes-Gallanzi primero sólo con fines médicos y en el último lustro dentro del mundo del arte.

“Desde el principio lo que queríamos era desarrollar un sistema cognoscitivo artificial, una computadora capaz de pensar un poquito, luego nos atrajo el arte, como científico y tecnólogo el arte para mí tiene dos beneficios: nos ayuda a entender más cómo funciona y cómo emular la creatividad humana, conocimiento que nos permite desarrollar sistemas de Inteligencia Artificial cada vez más poderosos”, compartió a La Razón Funes-Gallanzi.

Conocer cómo funciona la creatividad humana le ha permitido desarrollar, de manera paralela, un sistema para el diagnóstico de enfermedades raras. “Muchas de las cosas que le estamos agregando las estamos sacando del sistema de arte y las estamos poniendo al sistema de medicina, existe una simbiosis interesante, eso nos llevó a continuar con estas dos vertientes de forma paralela”, comentó.

Sombras nítidas en las montañas, de Helio Santos, para la exposición Bad Glitches Only. ı Foto: Cortesía Marcelo Funes-Gallanzi, Helio Santos y Estudio San Martín

El sistema tiene una base de conocimiento de cuatro fuentes, la escultura, la fotografía, la pintura y el dibujo, cuando se introduce un texto lo que hace es emular al cerebro humano y genera imágenes relacionadas.

“Cuando una persona menciona un texto tomamos cada oración y para cada una buscamos la imagen que es más similar en términos semánticos al texto que puso, utilizamos esa imagen para representar esa oración, hacemos esa mezcla que no es collage, porque tiene su propio sistema de color, es más lo que Matisse hacía, découpage, donde cortas partes y las juntas, el método de color le da eso”, detalló el especialista.

Si bien Raquel-IA ha podido ser aceptada en el mundo del arte no todo fue sencillo, al principio había cierto rechazo hacia esta tecnología que ahora cuenta con un acervo de cerca de mil obras.

“Inicialmente vimos una resistencia muy fuerte. Le llevé una presentación a un coleccionista de un banco y me decía ‘eso no es arte’; le gustaban, pero batallaba con el concepto, porque lo suyo son los óleos y los humanos, pero en el último año o dos, la gente se ha abierto, entiende que la Inteligencia Artificial en el arte es una herramienta más que nos va a permitir hacer obras interesantes”, apuntó.

Entramos a una subasta por esa curiosidad académica, primero si sería aceptada, segundo si alguien lo compraría, y tercero por cuánto, todas las seis obras se vendieron
Marcelo Funes-Gallanzi, Científico

Esa conjunción entre IA y arte hecho por humanos lo ha llevado a hacer colaboraciones, por ejemplo, en la exposición que presentó en 2022 en la Universidad Panamericana, Campus Guadalajara, mostró piezas creadas por Raquel-IA, obras de la IA intervenidas por artistas locales y piezas de los mismos creadores. Para la próxima exhibición, que estará abierta del 12 al 30 de junio en el Centro Cultural “Las Águilas”, en Zapopan, Jalisco, habrá 20 obras, de las cuales entre cinco y cuatro serán intervenidas por creadores.

Para Funes-Gallanzi, el arte con IA permitirá enriquecer el trabajo de los artistas y lamenta que haya sectores en los que no se acepte. Recuerda que desde mediados de los años 60 ha habido esta discusión cuando se creó el primer sistema de Inteligencia Artificial ELIZA, una psicóloga capaz de comunicarse con personas.

“Había la preocupación de que los sistemas de IA iban a dominar el mundo y sacarle trabajo a los humanos, había predicciones de que en 20 o 30 años iban a hacer todo tipo de cosas, llegaron los 90 y nada. Raquel-IA emula lo que ocurre en tu cerebro, tus sentimientos, las emociones de mucha gente, este tipo de herramientas sí va a tener un efecto en la evolución del arte, acelerará los periodos del arte, pero es una herramienta”, aseveró.

La Inteligencia Artificial abre posibilidades y modos de ver, siempre ha habido una relación de arte y tecnología, son posibilidades que abre cada desarrollo técnico
Felipe Rivas San Martín, Artista visual

Helio Santos y sus paisajes

Un artista mexicano que ha incursionado en el uso de la IA en su trabajo creativo es Helio Santos, quien primero comenzó utilizando la programación creativa para diseñar algoritmos que le permitieran generar obras y después comenzó a utilizar la Inteligencia Artificial para un proyecto que consistió en un bot de Twitter que publicaba paisajes mediante un algoritmo de aprendizaje automatizado.

“Entrené a mi propio sistema que generaba esas imágenes, fue mi primer acercamiento a la Inteligencia Artificial, era un algoritmo muy básico, comencé recopilando mil paisajes de diferentes colecciones de museos como el del Prado, el de Arte de Chicago y el Met de Nueva York, que tienen sus colecciones libres de acceso; lo que hacía era mezclar estos paisajes e identificar elementos, las nubes, árboles, vegetación, tuve que entrenarlo con imágenes, apoyado de un modelo de IA de paisaje”, compartió Helio Santos en entrevista con este diario.

El artista ha seguido explorando con la IA, la cual considera que en los últimos dos años ha avanzado muchísimo con herramientas disponibles para los artistas.

Predicador artificial, creado por Felipe Rivas San Martín y Jaime San Martín, a partir de una IA. ı Foto: Cortesía Marcelo Funes-Gallanzi, Helio Santos y Estudio San Martín

“Recurro a imágenes a partir de Inteligencia Artificial, sigo trabajando en el tema del paisaje como tema recurrente, como pretexto también, lo que hago es crear imágenes en plataformas que intervengo con algoritmos que tengo, hacen una mezcla de esas imágenes, mi aproximación a la IA es en un sentido poético de crear imágenes”, contó.

Como Helio Santos, Obvius, que fue el primero en vender en una casa de subastas una obra creada con IA, Retrato de Edmond Belamy, en 2018; y Jason Allen, quien ganó en la categoría arte digital con la obra Théâtre D’opéra Spatial, generada con un software, están experimentando los alcances de esta tecnología.

“Es una posibilidad muy grande, todavía es un tema muy dividido por la comunidad de artistas y el público en general, hay personas que rechazan completamente el uso de la Inteligencia Artificial, se habla de la pérdida de la cuestión artística, porque lo genera una máquina; pero también existen artistas que le están sacando todo el provecho, lo ven como un asistente que les puede ayudar a bocetar, visualizar ideas, que de otra forma hubieran tomado más tiempo, esta herramienta nos está haciendo la vida más fácil”, comentó Santos.

La discusión que hay actualmente sobre si es arte o no lo generado a partir de la IA a Santos le suena conocida, lo mismo ocurrió con la foto, que por mucho tiempo no se consideró obra artística; sin embargo, hoy es ampliamente aceptada.

“Al final son herramientas creadas por los humanos, es una extensión de nuestras emociones, sentimientos, conocimiento”, dijo, aunque consideró que como tal los artistas virtuales no podrían considerarse artistas, “son máquinas que generan imágenes y contenidos, el artista sigue siendo el humano, porque es el que tiene el capital cultural, habrá qué ver si podemos llamar artista a una máquina o el artista es el que está detrás de la máquina”, cuestionó.

Va a ser todo un proceso de adaptación, al final son herramientas creadas por los humanos, es una extensión de nuestras emociones, sentimientos, conocimiento
Helio Santos, Artista

Un predicador con IA

Un artista que también se ha introducido al mundo de la Inteligencia Artificial es el chileno Felipe Rivas San Martín, quien comenzó a incorporar esta tecnología a su arte con el proyecto Un archivo queer inexistente, en el que recreó fotografías de personas de la comunidad LGBT+ que emulan un álbum familiar antiguo, un archivo que a inicios del siglo XX fue negado porque se censuraban imágenes de personas del mismo sexo demostrándose afecto.

Tomó imágenes que capturó un estudio de la década de los años 30 en Brasil, en el que personas homosexuales que eran detenidas fueron obligadas a participar. La investigación tenía como propósito conocer “cómo la orientación sexual se vinculaba con la apariencia”.

“Tomé fotos del libro del estudioso brasileño y le pedí a la IA que reescribiera esas imágenes, esa memoria visual que marcó la historia de la homosexualidad desde la mirada científica, se ven personas tristes por la situación en la que estaban, entonces le pedí a la IA que reimaginara esa imagen, el resultado era bien impresionante, era pedirle que en lugar de que estuvieran en esa posición triste, normativa, que se volvieran imágenes homoeróticas, amorosas e incluso felices”, explicó a La Razón Rivas San Martín.

Su proyecto ha viajado a ferias de arte como Zona Maco o se ha expuesto en distintos recintos. Ahora el artista junto con Jaime San Martín, con quien conforma el colectivo Estudio San Martín, están por presentar el Predicador artificial, el próximo 18 de junio en la Plaza de Armas de Santiago de Chile, donde suele haber predicadores evangélicos.

Este predicador lo crearon a partir de un ChatGPT que integra predicas y se usan modelos generadores de voz que emulan la voz de un evangelizador.

“Es un proyecto autorreferencial de la Inteligencia Artificial, porque estas predicas están en una serie de discusiones mitológicas y religiosas, discusiones apocalípticas”, externó.

Para Rivas San Martín el uso de las tecnologías en el arte es parte de la historia. “Mi postura no es ni apocalíptica ni positiva, hay un punto intermedio, las herramientas dependen del uso que se le den. Celebro que haya una preocupación respecto al desarrollo de una tecnología que generará transformaciones”, comentó.

Señaló que el reto de utilizar la IA será democratizar y que quede fuera del modelo capitalista en el que actualmente vivimos. “Si se incorporaran otros ámbitos no capitalistas, como ONG, Estados, cuya función no sea la de regular sino pensar la tecnología de manera estratégica, probablemente podamos sacar todos esos frutos”, externó.

Rivas San Martín consideró que escuelas de arte ya deberían estar incorporando el conocimiento de la IA en sus planes de estudio, pues es algo que ya no se detendrá.

  • Cuándo: del 12 al 30 de junio
  • Dónde: Centro Cultural “Las Águilas”, en Zapopan, Jalisco