José Adiak Montoya (Managua, Nicaragua, 1987) —considerado en 2021 por la revista británica Granta, como uno de los mejores autores jóvenes en español— lanza Los actores perversos (Seix Barral, 2023): ficción que explora en la temática de la monstruosidad: alegoría de los temores del ser humano frente a lo diferente. Tres personajes, Gottwald, Levert y León, viven en la inmundicia junto a un anciano ciego que les ha dado albergue y los ama como si fueran sus hijos, sin saber de sus características: uno tiene cola; el otro, escamas; y el tercero, pústulas.
Tres seres desventurados en diálogo con una hermosa y cándida cineasta en una sediciosa mudanza a los espacios dramáticos de El hombre que ríe, de Víctor Hugo, y en la mejor literatura clásica de terror. El autor de la elogiada novela El país de las calles sin nombre (2021) entrega una provocadora fábula sobre lo anómalo y lo diferente integrado con aquello que nos hace desemejantes y, asimismo, irremisiblemente humanos.
“Este libro es hasta cierto punto un homenaje a esa literatura que me ha proporcionado grandes momentos de gozo. Su escritura ha sido un reto, quise ver si yo era capaz de estructurar algo similar. Me alejo de la temática política-social de mis dos anteriores novelas que abordan la terrible situación represiva del gobierno de mi país”, explicó en entrevista con La Razón, José Adiak, quien reside en México desde hace cinco años.
¿Curioso que usted escriba sobre la monstruosidad en los momentos en que Nicaragua está sometida a una atroz dictadura? Un estado totalitario trastocado en dictadura es algo monstruoso. En mi país jugaron con la esperanza de la gente, dijeron que la Revolución iba a conformar un mundo mejor para las generaciones futuras, que hoy huyen por la represión porque no pueden ejercer su libertad de pensamiento. Sí, es ‘monstruoso’ lo que sucede hoy en Nicaragua.
La monstruosidad no es más que un subterfugio para intentar ver lo que hay detrás del embozo, aquello que quizá nos hace sensitivos, ‘perfectos’José Adiak Montoya, Escritor
¿Narración de alegorías bíblicas, de referencias a Lovecraft y hasta de música urbana? Así es. Levert está dilucidado desde el registro bíblico del Sermón de la montaña; Gottwald está inspirado en algunos relatos de Howard Phillips Lovecraft; y en el argumento de León apelo a la clave del reguetón con dos informes literarios: El fantasma de la ópera, de Gastón Leroux, y de la novela El obsceno pájaro de la noche del escritor chileno José Donoso.
¿Discurso narrativo irregular, desigual, ‘antigeométrico’? Apelo a distintas tonalidades con el propósito de una escritura asimétrica, discontinua, sin progresiones narrativas reguladas por la lógica. Todo transcurre en un espacio y tiempo indefinido. Quise que la estructura fuera igual a la de un monstruo que se va erigiendo con pedazos, con piezas sueltas, quizás apropiándome de lo que hizo Mary Shelley con su Frankenstein.
¿La joven cineasta Eda como discordancia con el cosmos de los tres monstruos? Ella en realidad, es un contraste, pero enlaza ambos espacios, el de la belleza y la inmundicia. Cuando ellos la descubren se conmueven, intentan empujarla a su mundo, sobresaltados por la pasión que ella profesa por conocer el pasado, que para ellos es una suerte de acto evangelizador.
¿Qué es la monstruosidad? No es más que un subterfugio para intentar ver lo que hay detrás del embozo, aquello que quizá nos hace sensitivos, ‘perfectos’ y hasta aparentemente, bellos. La novela transita por esos abismos, por esas tinieblas humanas que repelen lo distinto, al otro.
- Autor: José Adiak Montoya
- Género: Novela
- Editorial: Seix Barral, 2023