Asisten personas de todas las edades

Danzan 5 mil con Elisa Carrillo en el Zócalo: “¡attitude!”

La bailarina principal del Staatsballett de Berlín imparte una clase masiva; un “momento supermágico”, describió la originaria de Texcoco

La primera bailarina, ayer, en la clase masiva la Plaza de Constitución. Foto: Cuartoscuro

Ante poco más de cinco mil personas, la bailarina Elisa Carrillo dio ayer la primera clase masiva de danza en la Ciudad de México, donde niñas, niños, adolescentes y adultos, enfundados en leotardos, mallas y zapatillas, dieron una muestra de sus capacidades en el ballet de la mano de la también embajadora de la cultura en México, en una actividad parte del Festival por la Igualdad Tiempo de Mujeres.

"Para mí este día es muy especial porque la danza me ha transformado y yo quiero que hoy la danza nos ayude a crear magia", expresó Elisa Carrillo al inicio de la clase, para posteriormente empezar a realizar ejercicios de calentamiento al ritmo de "Eres para mí", de Julieta Venegas, artista que se presentó el día anterior como parte del mismo festival.

La bailarina Elisa Carrillo daba indicaciones desde el escenario.

Después llegó el turno de la música clásica, que acompañaba estiramientos y maniobras de equilibrio apoyándose en las estructuras tubulares colocadas para hacer la función de barras. Después vinieron términos en francés como pas de deux, attitude o développé, y movimientos más estilizados. “Siempre recuerden terminar con la música, siempre en posiciones limpias”, recomendó.

Elisa Carrillo explicaba cada ejercicio y su cuerpo hacia el movimiento respectivo; niñas, niños y jóvenes la observaban con atención, pero también con admiración, y hacían su esfuerzo por replicar lo mejor posible cada prueba, algo que no parecía ser problema para ellos, ya que “a México nos gusta bailar”, comentó la bailarina.

La bailarina Elisa Carrillo daba indicaciones desde el escenario.

“Recuerden que están viéndonos en otras partes del país, así que sonrisas”, dijo Elisa Carrillo a quienes estaban tomando la clase, que fue transmitida en vivo a través de redes sociales. Y entonces las indicaciones continuaban: “Rodillas estiradas, estiramos el pie para atrás, estómagos fuertes… Es importante no dejar caer los hombros”.

El calor del sol pegaba con intensidad sobre la Plaza de la Constitución. Sin embargo, esto no mermaba el ímpetu de las y los asistentes a la clase, que provenían no solamente de las diferentes alcaldías de la Ciudad de México y de los Pilares de la Secretaría de Cultura local, sino también del interior de la República. "Gracias por hacer este viaje, es muy importante para la danza", reconoció.

Se colocaron estructuras tubulares como barras.

“Que no sólo sea el sol que nos calienta sino también el trabajo. ¿Cuándo se iban a imaginar que íbamos a estar aquí? Vamos a disfrutar este momento porque es supermágico”, expresó la bailarina, quien no ocultaba su emoción ante el suceso.

Temas como “Bésame mucho” y “Cielito lindo” en el piano de la maestra Nodira Burchanowa sirvieron de complemento para los ejercicios. Elisa Carrillo también cantaba por momentos y al término de cada rutina los aplausos no se hacían esperar, a lo que la bailarina respondió: "El aplauso se lo merecen todos por estar aquí".

Posteriormente, Elisa Carrillo mencionó que el ballet clásico ha evolucionado, por lo que los bailarines “debemos ser versátiles”. Entonces “se convirtió” en un chelo para ejecutar una coreografía de Nacho Duato, acompañada por el bailarín Mikhail Kaniskin. Muchas chicas abandonaron sus lugares para acercarse al escenario y apreciar mejor los movimientos.

La bailarina Elisa Carrillo daba indicaciones desde el escenario.

Más tarde llegó el momento de bailar todas y todos juntos. La bailarina destacó que se puede montar una coreografía con cualquier tipo de música, para lo cual se valió del tema “México en la piel” interpretado por Luis Miguel.

Después de una hora y cuarenta minutos de clase, vino la despedida. “Gracias por este día tan especial”, exclamó Elisa Carrillo visiblemente conmovida, a lo que muchas de sus alumnas respondieron gritando “¡Te amamos!”.

Sin embargo, la bailarina salió a saludar a los asistentes, quienes eufóricos se acercaron a pedirte autógrafos y selfies. Los más afortunados se fueron con la firma de la bailarina en playeras y zapatillas.

La bailarina Elisa Carrillo daba indicaciones desde el escenario.