Libro de Paulette Jonguitud

El mundo desplazado aborda el miedo de ser mujer en México

“La novela advierte de la presencia de esos aciagos índices psicológicos que nos obligan a tomar decisiones extremas”, comparte; los trastornos mentales, el arte y la creatividad son los ejes de la historia

La autora, en una imagen proporcionada por la editorial.
La autora, en una imagen proporcionada por la editorial. Foto: Random House

La narradora y artista plástica Paulette Jonguitud (Ciudad de México, 1978) —autora del popular libro de misterio para niños El Loco del Martinete (2013)— publica El mundo desplazado (Random House, 2024): novela protagonizada por cuatro mujeres enfrentadas a la depresión, ansiedad y miedo a través de alegorías que refieren las espinosas circunstancias de ser mujer en México. Los trastornos mentales, el miedo y el arte son los ejes de esta narración coral que profundiza en los vínculos entre la creatividad y los desequilibrios mentales.

“He querido narrar la historia de cuatro mujeres: una niña, Inés y tres adultas: Paula, Miranda y Agustina. Las cuatro batallan con perturbaciones mentales y se han acercado al arte por diferentes vías. La intención se centra en exponer como cada una se enfrenta a sus recelos, desconfianzas y aprensiones. ¿De dónde proviene el horror? A veces pensamos que se ubica en hechos sobrenaturales; pienso que todo está en nuestra propia mente, sitio donde habitan esos monstruos internos que nos enfrentan a la realidad y nos conminan a preguntarnos quiénes somos. La novela advierte de la presencia de esos aciagos índices psicológicos que aguijonean en la cabeza y nos obligan a tomar decisiones extremas”, expresó en entrevista con La Razón la narradora Paulette Jonguitud.

Una de las cuatro protagonistas, Agustina, por ejemplo, como madre debe contender con el miedo invariable de no sólo cuidar la salud física de sus hijos, sino también su bienestar mental. Las mujeres no tenemos espacio para conciliarnos con nuestras angustias
y depresiones
Paulette Jonguitud, Autora

¿Mujeres que pierden contacto con la realidad? Sí, de ahí nació esta historia. Tengo temor de alejarme de la realidad, los fantasmas están rondando, pero no son reales. Me interesaba explorar en las acciones para enfrentar el miedo cotidiano. Una de las cuatro protagonistas, Agustina, por ejemplo, como madre debe contender con el miedo invariable de no sólo cuidar la salud física de sus hijos, sino también su bienestar mental. Las mujeres no tenemos espacio para conciliarnos con nuestras angustias y depresiones.

¿El miedo como un índice de identificación personal? Cada persona se empapa de sus desconfianzas. Por ejemplo, en la niña Inés irradié las aprensiones y dudas que me asediaron en mi infancia; con la escultora Miranda, de 60 años, expreso mis angustias frente a la llegada de la vejez. La novela también aborda los temores que las mujeres enfrentamos en la vida diaria: la violencia de género y el machismo.

¿El arte como una forma de tenacidad? Me interesaba exponer a las acciones artísticas como gestos de entereza y curaciones de heridas. La niña Inés encuentra conexiones con otras mujeres artistas: el arte, en este caso, es una vía para dialogar entre distintas generaciones y una herramienta para enfrentar las aprensiones. En la novela, la historia inicia con las apariciones de unos artefactos artísticos en terrenos baldíos del sur de la Ciudad de México y la niña, Inés, empieza a interactuar con ellos.

Portada del libro "El mundo desplazado" de Paulette Jonguitud
Portada del libro "El mundo desplazado" de Paulette Jonguitud

El mundo desplazado

  • Género: Novela
  • Editorial: Random House, 2024  

¿Presentación de un mundo distópico? Esas máquinas forman parte de lo cotidiano: aparecen personajes como los podridos, que son monstruosidades creadas desde los atisbos de una niña para describir a los “hombres que agreden a las mujeres”. Inés es un personaje clave en la edificación de la atmósfera distópica de la narración, su imaginario propicia esas referencias iluminadas por monstruos literarios, como el Frankenstein, de Mary Shelley. A medida que la relación entre la niña y los artefactos se ahonda, los lindes entre la realidad y la fantasía desaparecen. Mi objetivo era crear una historia en que el horror y una fantasía intimista se entretejieran.

PERSONAJES

  • Miranda: Una escultora enigmática que se convierte en la guía artística de Inés, la protagonista joven de la novela. Deja misteriosas máquinas en terrenos baldíos. 
  • Inés: Es una niña valiente, quien a pesar de los miedos que la acechan, protege a su hermano menor, Diego, cuando su madre desaparece misteriosamente. 
  • Agustina: Es la madre de Inés y Diego. Está atrapada en una lucha constante contra el trastorno de ansiedad que la consume. Sufre ataques de pánico constantemente. 
  • Paul: Es la mamá de Agustina y abuela de Inés. Es una presencia oscura y perturbadora que habita la casa familiar.