Durante una gira por España platicando con un amigo, hubo una frase que al coreógrafo Jaime Camarena lo dejó reflexionando: “Joder, es que vosotros los mexicanos son inválidos emocionales”. Pensó en esta peculiar manera de amar que tenemos y cómo reaccionamos al desamor o a esos amores imposibles que tanto han nutrido a los boleros de Agustín Lara, Lucho Gatica o Toña La Negra, entre otros más. Fue el punto de partida para concebir su obra En código bolero. La dulce limerencia, en la que reflexiona sobre la “enfermedad del amor”.
“La música ayuda a fomentar una educación emocional, una percepción de cómo suceden las cosas; en este caso, el bolero nos habla generalmente del amor imposible, del amor no realizado o no realizable. A partir de eso elaboro una investigación sobre el bolero, de ahí investigo las relaciones neurocerebrales que son consecuencia de las rupturas amorosas. Luego descubrimos la palabra limerencia, que define perfectamente la enfermedad, ese malestar, esa pesadez, esa tristeza, esa muerte chiquita que sentimos cuando nos separamos”, explicó en entrevista con La Razón Jaime Camarena, director de la compañía A Poc A Poc.
A partir de esa investigación creó 18 segmentos coreográficos en los que los boleros son una pieza fundamental para abordar la “enfermedad del amor” que se ha expresado en diversas canciones. Cómo no recordar las siguientes: “No sé tú/Pero yo te he comenzado/A extrañar/En mi almohada no te dejo/De pensar”; “Te vas porque yo quiero que te vayas/A la hora que yo quiera te detengo/Yo sé que mi cariño te hace falta/Porque quieras o no yo soy tu dueño”, o “Arráncame la vida/Con el último beso de amor/Arráncala/Toma mi corazón”.
El montaje “se desarrolla en tres espacios ficcionales, un no lugar, que es la limerencia, la enfermedad del amor; otro es un salón de baile a la vieja usanza, como California Dancing Club, El Salón los Ángeles o Salón México, donde la gente se reunía a bailar y a compartir sus limerencias con esas músicas; y el tercero es una estación de baile XHAPOC, tu estación del recuerdo, donde interviene Rojo Córdova, como maestro de ceremonias y locutor nos da una visión muy amplia de lo que es el bolero a nivel verbal”, detalló.
En el espectáculo, el público verá a 11 bailarines, cuyos cuerpos se mueven bajo los códigos del bolero que ha ido diseccionando el coreógrafo. “Nos gusta mucho la fisicalidad. En código bolero se generó un lenguaje corporal que tiene que ver con el teatro físico, con la danza y con la generación de pequeñas unidades de acción, las cuales tienen su raíz en la poética del bolero. Elegimos una serie de canciones, sobre éstas se seleccionó una serie de frases. Paso por el análisis de cuatro códigos que encuentro en el bolero”, puntualizó Jaime Camarena.
La coreografía fue estrenada en 2017 en Bellas Artes y ahora que se remonta, el director de A Poc A Poc hizo algunas modificaciones, quitando algunos boleros y agregando otros que le permitieran nuevas exploraciones sobre estas imposibilidades del amor.
La puesta en escena, después de haberse presentado en diversos países, actualmente se encuentra en temporada en el Teatro de las Artes, del Centro Nacional de las Artes, en la Ciudad de México, hasta el 8 de diciembre, con funciones de jueves a domingo.
Jaime Camarena espera que su propuesta pueda aportar para que se siga difundiendo el legado del bolero.
“Sigue en nuestro imaginario, acaban de inaugurar la Plaza del Bolero Armando Manzanero. Creo que Luis Miguel fue importante en su momento para la conservación del bolero, fue un puente generacional. Esta modalidad está presente en todos lados, en la radio, en algún programa de televisión; incluso sales a comer la barbacoa y un señor te canta ‘El Reloj’, inmediatamente me genera un cierto halo de nostalgia”, concluyó el artista.
En código bolero…
- Cuándo: hasta el 8 de diciembre
- Dónde: Teatro de las Artes del Cenart
- Horarios: jueves y viernes, a las 20:00 horas; sábados, a las 16:00 y 19:00 h, y domingos, a las 18:00
- Localidades: 150 pesos