Como cada año, el poblado de San Pedro Tlalcuapan, ubicado en las faldas del volcán La Malinche, en Tlaxcala, llenó las fiestas decembrinas con magia al presentar su Nacimiento viviente, para el cual los pobladores, en especial la familia Meléndez Bello, no sólo adornan sus casas con luces y parafernalia referente a la natividad, sino que incluyen animales reales. Esto le brinda a los visitantes la oportunidad de convivir y alimentar a animalitos como burros, patos, ovejas, pollos, cerdos y hasta peces. Esta tradición busca fomentar el cuidado animal.