El espacio temporal multidisciplinar Galileo 92 abre sus puertas con dos propuestas artísticas con las que sus impulsores, Ciclo y ReUrbano, buscan apoyar la reactivación cultural del país, sesgada por la crisis sanitaria del Covid-19.
El inmueble ubicado en Polanco albergará, hasta el próximo 28 de febrero, la intervención de sitio Spandemia y la exposición Yo me iré y los pájaros seguirán cantando.
“Es un esfuerzo por reanimar las actividades culturales en un momento en el que el público ya busca volver un poco a sus actividades previas. La gente de ReUrbano, quienes recuperan espacios en deterioro en la ciudad, nos ofrecieron este lugar para gestar una actividad cultural en lo que el edificio es adquirido o demolido”, detalló a La Razón Andrea Paasch, curadora del proyecto.
En Yo me iré y los pájaros seguirán cantando, el artista mazateco Filogonio Naxín aborda el daño ecológico que la humanidad ha generado en el planeta y la manera en que la vida continuará en la Tierra cuando el homo sapiens se extinga. Muestra 54 piezas que conjuntan collage, acrílico, óleo, acuarela, tinta china y monotipo; además de dos murales hechos específicamente para el recinto.
“Está centrada en los cambios que se están dando en el planeta a causa de la manera en que lo habitamos; específicamente habla de las catástrofes ambientales en la Sierra Mazateca. También hay una serie dedicada al coronavirus”, explicó Paasc.
Por su parte, Spandemia, de Cristina Ochoa, es una intervención de sitio específico que consiste en un consultorio de herbolaria, un jardín botánico y una serie de lienzos teñidos con la fitolaca que crecía en Galileo 92, planta considerada por muchos como una plaga.
“Ésta intervención se activa cuando ella está presente, pues da consultas y explica a los visitantes las funciones de las hierbas. La gente la puede encontrar de martes a sábado, de 12:00 a 17:00 horas”, abundó Paasch.
- Artistas: Cristina Ochoa y Filogonio Naxín
- Dónde: Galileo 92 (Galileo 92, Polanco)
- Hasta: 28 de febrero