Esperan a 44 mil turistas

Con mucho baile y sabor cubano, inicia el Cervantino

Formell y Los Van Van con la Orquesta Filarmónica del Desierto de Coahuila encabezan concierto inaugural; deleitan con temas como “Anda, ven y quiéreme” y “Dale dos”

Asistentes, ayer en la Alhóndiga de Granaditas, durante el espectáculo.
Asistentes, ayer en la Alhóndiga de Granaditas, durante el espectáculo. Fotos: Rodolfo Issac García Reséndiz/FIC

Con un minuto de aplausos en honor al personal médico que ha estado en la primera línea de batalla contra el Covid-19, ayer inició la edición 49 del Festival Internacional Cervantino (FIC), que regresó de manera presencial, después de que el año pasado sólo se hizo en formato digital por la pandemia.

El público se dio cita en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas, Guanajuato, para disfrutar de la música interpretada por la Orquesta Filarmónica del Desierto de Coahuila y la agrupación cubana Formell y los Van Van.

El concierto comenzó con la Orquesta Filarmónica del Desierto de Coahuila, que ejecutó Mosaico Mexicano, de Arturo Rodríguez. Tras ello, subieron al escenario los integrantes de los Formell y los Van Van para poner a gozar con el tema “Aquí el que baila gana”.

Los artistas cubanos y coahuilenses, durante la presentación.
Los artistas cubanos y coahuilenses, durante la presentación.

“Buenas noches, México, saludo a todos los cubanos que están acá. Un aplauso para la filarmónica, es una mezcla de México y Cuba”, expresó Roberton Van Van.

Acto seguido preguntó a los asistentes si querían bailar y todos respondieron con un rotundo: “Sí”. Hizo una breve pausa porque había problemas con el audio, por lo que aprovechó ese tiempo para cantar a capela “Guantanamera”.

Hay que escuchar la música, vivirla y bailarla; las artes plásticas hay que verlas y sentirlas, siempre con el cuidado que esta época nos demanda
Marina Bespalova, Subsecretaria de Desarrollo Cultural

Ya con los ajustes debidos continuó con “Anda ven y quiéreme” y “Dale dos”. El público se puso de pie, algunos entre efusivos y tímidos se pusieron a bailar en sus asientos, en solitario. La fiesta se sentía al por mayor y Roberton subió al escenario a un niño para bailar con él.

Sin los Van Van, la filarmónica ejecutó la emblemática composición de Arturo Márquez Danzón No. 2.

Después volvió a subir la orquesta de La Habana para interpretar en solitario un popurrí de éxitos y “Sandunguera”.

Otros temas que sonaron con la filarmónica fueron “Recíbeme” y “Somos cubanos”. La velada festiva terminó con “Esto te pone la cabeza mala”.

Este año, la Secretaría de Cultura estima una derrama económica de 32.2 millones de pesos. Además esperan más de 44 mil turistas en hoteles de la capital.

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