Hacen catarsis en la pandemia con nuevo disco dedicado al tango

El guitarrista argentino Damián Tuso y la violinista mexicana Nadia Cano decidieron enfrentar la pandemia del Covid-19 haciendo música de cámara; él quería grabar un fonograma casero con obras emblemáticas del tango; ella aceptó el reto de conformar un dueto en que su instrumento se sumergiera en las frondas de la música rioplatense. Ensayaban cada tarde en el encierro pandémico, escogieron el repertorio y se fueron a los estudios La Huelga Records: nacimiento de Impalpable (Producción Independiente, 2021).

Programa conformado por Tres temas para violín y guitarra (“Anoche te vi”, “Hoy en día”, “Mañana vemos”), de Coco Nelegatti; Suite de Buenos Aires (“Pompeya”, “Palermo”, “San Telmo”, “Microcentro”); Los mareados, de Cobián/Cadimaco; Flores Negras, de Francisco De Caro; y Tríptico Porteño (“Estación retiro”, “El Rosedal”, “Plaza de Mayo”), de Máximo Diego Pujol.

Damián Tuso, guitarrista de formación clásica, quien desde niño tuvo contacto con las músicas del Río de la Plata (tango, milonga, candomblé...); Nadia Cano, violinista también de formación clásica de estilo muy personal abierto a todas las propuestas musicales: folclórico, pop, jazz y música de cámara.

“Este disco es un capricho y también una necesidad. No podía estar sin tocar durante el encierro. Lo mismo le sucedía a Nadia: hablé con ella y aceptó conformar este dueto. La música es el entorno donde soñamos, quisimos que esos sueños se convirtieran en síncopas, en prosodia. Desdén al encierro de tardes enteras ensayando, explorando piezas emblemáticas del tango y sus variantes. Aquí está el disco, aquí está el resultado del desafío a la pandemia”, comentó en entrevista con La Razón, Damián Tuso.

Encierro y grabaciones. ¿Cómo conjugaron la incertidumbre de la pandemia con el deseo de tocar? Gracias a eso escapamos del desconcierto, del dolor, de la ausencia, de la distancia. La música es un puente para que transiten por ahí las emociones. Este álbum es más que todo, un reflejo de nuestras vibraciones internas, de nuestras inquietudes.

¿Llama la atención el formato de guitarra y violín para ejecutar tango? En sus inicios el tango se tocaba con guitarra y violín. El bandoneón vino después así como los instrumentos percutivos.

¿Enlace, diálogo entre un instrumento melódico, el violín, y la guitarra en despliegue armónico? Así es, Nadia lleva los hilos melódicos mientras yo con la guitarra voy edificando armónicos. Hemos logrado ese diálogo después de ensayar y trabajar mucho con las obras escogidas.

Se ausculta una ‘fraternidad instrumental’ en el disco. ¿Complicidad? Cuando tocamos en una agrupación tiene que haber connivencia, pacto, acuerdo. Nadia y yo nos convertimos en cómplices desde el momento que decidimos hacer el disco. Complicidad que fue creciendo en los cuatro meses que duró todo el proceso de grabación y ensayos.

Se nota en las interpretaciones de Nadia unos ataques ‘tiernamente agresivos’. ¿Cómo asume usted esa vehemencia? Cómo decíamos: yo recibo ese ímpetu melódico y lo aderezo con pautas armónicas que asimismo ella recibe: se alimenta para exorcizar los motivos melódicos.

¿Selección de las composiciones? Escogimos un Tríptico, una Suite, tres piezas concebidas para guitarra y violín y dos obras emblemáticas: “Los mareados” y “Flores negras”. Compositores significativos que trazaron pautas y rupturas en la música argentina: Nelegatti, Diego Pujol, Cobian y De Caro. No fue fácil escoger este repertorio y desdeñar otras obras. Muchos nos han preguntado las razones de la ausencia de Piazzola, cuestión que quizás, por el formato de guitarra y violín optamos mejor por obras más cercanas a la música de cámara.

¿Tango de ‘cámara’? Tango de ecos íntimos, de silencios y pausas. Es un disco para escucharlo con el mismo ánimo de cuando nos imbuimos en Bach, Corelli, Vivaldi o Handel.

¿Nostalgia gozosa en los retumbos de aires de milonga y del candomblé? El exilio, la ausencia, el desconcierto, el viaje, la mudanza y la sorpresa son los elementos que nutren la música del Río de la Plata.

¿Música corporal y también espiritual? Alguien dijo, se me olvida ahora el nombre, que el tango es ‘una tristeza que se baila’. Yo agrego que esa danza tiene su nido en el alma.

¿Cuándo presentan el álbum? Lo hemos estado presentando en varios recitales que hemos realizado. Pronto lo llevaremos a El Convite y al Foro El Tejedor. Es una producción independiente, la cual no entra en los parámetros de las distribuidoras comerciales de fonogramas en México.