Unas botas de casquillo desgastadas con polvo y algunas manchas atesoró Ilse Villegas durante 20 años, la razón: fue el último calzado que su papá usó antes de fallecer en un accidente de trabajo. Un objeto que ahora, a sus 36 años decidió donar al Museo de la Relaciones Rotas de Croacia como una forma de cerrar ese duelo y compartir la historia que marcó su vida.
“Decidí donarlas para cerrar el ciclo y que la historia sea conocida por las personas, no es el último recuerdo de mi papá, pero sí el último objeto que él dejó. Hacer esto me ayudó a una parte del duelo que llevaba sin poder trabajar por muchísimos años, son sentimientos encontrados, pero es bastante liberador y reconfortante saber que es parte de algo que tal vez le hubiera gustado a mi papá”, compartió la joven en entrevista con La Razón.
Las botas de su papá es uno de los cerca de 100 objetos de diversos países del mundo que forman parte del acervo del Museo de las Relaciones Rotas de Croacia, pero que a partir de hoy se pueden ver, junto con sus historias, en el Museo del Objeto Objeto (MODO), en la Ciudad de México.
Las relaciones quebrantadas que se presentan en la exhibición abarcan desde una ruptura amorosa, la pérdida de un hijo o de una madre, el distanciamiento de un amigo o hasta una pérdida de trabajo.
Algunas de estas historias se sitúan en sucesos específicos, el sismo de 2017: un casco de construcción es el objeto que simboliza la ruptura de una relación que surgió a raíz de la tragedia: “Fue el amor de mi vida, pero así como con el terremoto, estoy aprendiendo a soltar”, se lee en la historia de esta pieza.
Varias anécdotas más se enmarcan en la pandemia: una gran lona en la que se lee: “¿Compartirías el resto de tu vida conmigo?”, el recuerdo de una mujer de Villahermosa, Tabasco, que quedó como símbolo del “futuro que ya no fue”, después de que su esposo falleciera por coronavirus en enero de 2020; o un disco de Pink Floyd, el cual guarda la historia de una mujer cuya pareja casi muriendo de Covid le confesó que era casado.
“El Museo de las Relaciones Rotas es un lienzo en blanco en el que la gente puede expresar, donar estos objetos que tienen que ver con la emocionalidad, no únicamente de una relación amorosa que se rompió, sino laboral, incluso mudarse de algún país; alguien que resultó intolerante al gluten, entonces ya no podría comer pizza y ya es una relación rota.
“Es una representación del contexto en el que vivimos, aquí hay muchas historias que fueron pérdidas amorosas, familiares, incluso por el Covid, no es algo que seleccionamos nosotros sino que el contexto nos influye muchísimo para que estas personas puedan donar sus objetos”, explicó a este diario Dražen Grubisic, quien junto con Olinka Vištica ha conceptualizado este museo, cuyo acervo ya ha recorrido 59 ciudades antes de llegar a la CDMX.
En la exposición estas rupturas también presentan las distintas formas de violencia que puede haber en una relación o el empoderamiento que queda después de decir adiós a alguien a quien amas o amaste; o cómo el amor te ayudó a superar alguna etapa difícil de tu vida.
Muestra de eso es un celular partido a la mitad de una mujer que vivió cinco años en una relación violenta, su entonces pareja le rompió ese objeto con sus propias manos un día que estaba enojado, esa violencia escaló con el tiempo y después ese hombre comenzó a golpearla; o un mosaico con la leyenda “Mejor sola que mal acompañada”, de una mujer de Texas, cuyo esposo “se escapó con una compañera de trabajo” después de 18 años de matrimonio, viviendo ese duelo ella viajó a Tijuana y compró esta pieza con la que ahora busca “inspirar a otras personas que enfrentan la pérdida de una relación”; o unas tapas de crema de cacahuate que una mujer guardó para rememorar cómo con el apoyo de su entonces pareja fue superando la anorexia.
En la muestra también hay historias tiernas como las de los primeros amores; o la receta que una nieta conserva para recordar a su abuela.
“La selección dependió mucho de que hubiera un equilibrio porque había historias que podían ser muy tristes, para que no todas fueran así quisimos que hubiera otras divertidas, otras más alegres o que tenían otro sentir; fue leer las historias, ver qué objetos que faltaban de la colección del museo de Croacia y a partir de eso colocarlas en esta colección”, comentó Grubisic.
La exposición se inaugura hoy y podrá visitarse en el MODO hasta el próximo 26 de marzo de 2023. Hay una sala en la que los asistentes pueden contar sus propias historias para cerrar algún duelo.
- · Cuándo: del 15 de noviembre de 2022 al 23 de marzo de 2023
- · Dónde: Museo del Objeto Objeto (MODO) (Colima 145, Colonia Roma)
- · Horarios: martes a domingo de 10:00 a 18:00 horas
- · Costos: $60 general
Con información de Raúl Campos