De niña, ya con las zapatillas de ballet, las mallas y tutú, Elisa Carrillo, primera bailarina del Staatsballett Berlin, veía emocionada videos de la icónica coreografía de Maurice Béjart, Bolero, una pieza que le impresionaba a tal punto que anhelaba bailarla un día. Se podría decir que era una obra que siempre estaba con ella de alguna u otra manera: cuando la montaron en el Ballet de Stuttgart llegó a ver cómo se preparaba y si llegaba a encontrarse con algún colega que la había bailado quería conocer todo sobre su experiencia.
Con una trayectoria consolidada y considerada la más importante bailarina mexicana en la actualidad, interpretará esa coreografía que estuvo en sus más grandes sueños, y no sólo eso, con ésta hará historia al convertirse en la primera artista de nuestro país en montarla, algo que la llena de emoción y la mantiene estudiando cada detalle para poner “todo su amor y energía”, contó en entrevista telefónica con La Razón desde Berlín, Alemania.
Carrillo, mujer de retos, ya se encuentra ensayando Bolero, que además tendrá la particularidad de contar con elenco 100 por ciento nacional, ya que la ganadora del Benois de la Danse, logró que el Béjart Ballet Lausanne le autorizara seleccionar a un grupo de bailarines mexicanos para la producción que presentará en Toluca, el próximo 31 de julio, y en Texcoco, el 1 de agosto.
Estás por presentar en México Bolero, esta obra tan importante de Maurice Béjart, ¿qué representa para tu carrera? En el mundo hay grandes compañías donde no todo mundo ha tenido la oportunidad de hacer esta producción, dentro de las pocas agrupaciones que lo bailan, muy pocos bailarines han tenido esa oportunidad, entonces me siento muy honrada y agradecida, con un gran significado por tener la dicha de presentarlo con bailarines mexicanos, creo que va a ser único y especial, es algo que llevo años de soñar. Estoy segura que lo vamos a disfrutar y que el público en México también. Aparte, ahora que han sido los meses de preparación, de ir a Suiza a ensayar con la compañía, de sentir realmente lo que es esta gran pieza icónica me motiva, no te imaginas lo emocionada que estoy, además poder compartirlo con muchos mexicanos, poder trabajar juntos para esto, creo que será uno de los momentos más importantes de mi vida.
¿Cuándo fue la primera vez que viste Bolero y pensaste, lo quiero bailar? La vi hace muchos años cuando todavía estaba en México, vi grabaciones, esa imagen se me quedó grabada, la música es maravillosa y tan conocida. La primera vez que vi eso en video fue un momento que me sorprendió y me dejó sin palabras, es algo que se ve tan simple, son cosas tan claras, tan puntuales. Es impresionante cómo de principio a fin te va llenando hasta el momento en que termina el ballet y es una cosa maravillosa lo que pasa. Después de eso tuve oportunidad de conocer a algunos bailarines que lo hicieron en algunas compañías; por ejemplo del Ballet de Stuttgart llegué a ver algunos meses un poco el trabajo, la preparación, los ensayos, y hace un par de meses pude verla en Bélgica, en vivo. Fue algo que me impresionó, fue un momento muy emocionante para mí disfrutarlo así, entre la música, los pasos, la fuerza de los bailarines en escena, es algo muy especial. Si te puedo decir algo, cuando lo vi en vivo por primera vez se me salieron las lágrimas de emoción, porque es algo que siempre había querido, tenía el recuerdo de niña, de cuando lo vi varias veces y durante toda mi carrera. Me di cuenta de cómo es la perfección de la danza con la música, cómo hacen un equipo maravilloso, la forma, el movimiento, las notas musicales, así como va creciendo la música hasta llegar a lo más fuerte, a lo más emocionante, es lo que va pasando con el movimiento de la bailarina o bailarín encima de la mesa.
En el rol protagónico, que es el que harás, ves como si el bailarín llegara al límite de lo que puede expresar con su cuerpo… Sí, es justamente lo que pasa. Los grandes bailarines con los que he platicado, que han tenido la oportunidad de bailar esta coreografía, me comentan lo difícil que es físicamente, porque es agotador, así como empieza de una manera tan sencilla y suave, termina con gran fuerza, como que te envuelve. Alguien alguna vez me dijo que es algo como diabólico, en el sentido en que te envuelve, hay un punto en el que te dejas ir con la música, estás como en otro nivel, en otro mundo, porque es una cosa tan impresionante. Una vez que lo aprendí, que empecé a sentirlo, a practicarlo y practicarlo, al final estás exhausto, pero al mismo tiempo tienes una gran fuerza que viene de la música, de la energía. Aún no lo he hecho con los hombres que estarán alrededor conmigo, creo que ese momento va a ser todavía más emocionante.
Si te puedo decir algo, cuando lo vi en vivo por primera vez se me salieron las lágrimas de emoción, porque es algo que siempre había querido, tenía el recuerdo de niñaElisa Carrillo, primera bailarina
Ya comenzaste a ensayar, pero ¿cómo fue ese primer día que entraste al salón para aprender la pieza? Era mucha emoción, no podía creer que ya estaba ahí, además de que el día que fui a mi primer ensayo llegué de Berlín, tuve una función en la noche, me fui en la madrugada, fue aterrizar, súbete al tren y llegar rapidísimo para la clase, de repente ya estaba en el salón con la música, con el director de la compañía, con Gil Román, quien fue bailarín y trabajó tantos años con Béjart. No lo podía creer, hasta la fecha pienso que no creo que haya pasado, fue emocionante porque además trabajar cómo van las secuencias, dónde van las manos, qué significa cada sección de esta maravillosa pieza, tenía una idea de la coreografía y cuando estás ahí y te van diciendo los detalles, dónde va tal movimiento, por qué se llama así, porque cada sección tiene un nombre y tiene un por qué, fue como aprender y profundizar, eso fue un gran reto, tratar de lograr lo que te piden, lo que Béjart les decía. En los ensayos que he tenido hay un momento en el que sientes que el cuerpo está tan cansado, pero al mismo tiempo escuchar esa música hace que te salga como una energía por dentro. Acabo de ir hace poco a volver a ensayar antes de irme a México y se empiezan a pulir detalles, estoy emocionada de ir a México y ensayarla con los bailarines.
Eres muy aguerrida y valiente en tus proyectos, todos los ojos estarán puestos en ti cuando estrenes la producción, ¿no te intimida un poco esto? No sólo en la danza, en la vida, creo que siempre hay grandes retos, de trabajar para salir adelante, lograr las cosas, eso te va a dar fuerza, energía, aprendes y sales adelante. Creo que es maravilloso tener desafíos. Claro que impone, es una gran coreografía, tengo el deseo de hacerlo de la mejor manera, que el público la disfrute, entonces hay que ser valiente, porque no es nada fácil, pero es algo de lo que amo. La danza no es nada fácil, siempre es un gran reto presentarte ante el público y tratar que disfrute, que tú también disfrutes lo que hagas. Hay momentos de mucha tensión, porque siempre que voy a mi país siempre quiero dar lo mejor, cada vez que salgo al escenario, es un gran reto porque quiero dar lo mejor de mí, no sé si decir presión, pero es pensar que tienes que hacer bien las cosas, dar lo mejor de ti, es algo que me impone mucho, pero al mismo momento me fascina, para mí es maravilloso estar en el escenario. En esta ocasión es una pieza tan conocida y especial. Cada vez que bailo, sea lo que sea le dedico lo mismo, todo mi amor, toda mi energía, pero no estoy sola con esta pieza, estoy alrededor de varios bailarines que me van a apoyar, el gran reto es hacer una función que le deje al público feliz y podamos lograr lo que Béjart deseaba, de transmitirle al público, es una pieza perfectamente hecha que sólo nos queda dar lo mejor de nosotros, salir al escenario con el corazón, con toda nuestra energía, estar superconcentrados y tener una linda presentación.
¿Quiénes son los bailarines que compartirán escenario contigo? Antes de la producción un maestro que está trabajando con la compañía de Béjart va a llegar, va a haber una selección. Hay bailarines de la Compañía Nacional de Danza que quieren estar en este proyecto, de la Escuela Nacional, de algunos otros grupos que hemos contactado.
No te imaginas lo emocionada que estoy, además poder compartirlo con muchos mexicanos, poder trabajar juntos para esto, creo que será uno de los momentos más importantes de mi vida"Elisa Carrillo, primera bailarina
¿Cómo lograste obtener los derechos para presentar la coreografía en México? Hemos estado en contacto, me conocen, estuvimos hablando, estaba el deseo de bailarlo. En esta ocasión por el tiempo, las fechas, que la compañía de Béjart tiene giras, salió esta oportunidad de hacerlo con bailarines mexicanos, que de verdad es maravillosa, porque podría hacerlo con la compañía de Béjart o bailarines de la agrupación, lo cual sería bellísimo, pero hacerlo con bailarines mexicanos, que estén en mi país, que puedan sentir y disfrutar esta coreografía es un regalo maravilloso. Creo que salieron las cosas de la mejor manera, es darle la oportunidad a bailarines de mi país de hacer la pieza de este gran coreógrafo.
¿Habrá música en vivo en las funciones? En esta ocasión no habrá música en vivo, pero es algo que se está planeando y espero en el futuro, cuando volvamos a repetir estas funciones. A veces uno no sabe en el futuro cómo van a estar las cosas, creo que ahora después de lo que hemos vivido en el mundo pueden cambiar, pero sí, está esa opción en mente, estamos trabajando en ella y ojalá que podamos lograrlo en otro momento.
Entonces, ¿contemplas más funciones? El plan es hacer estas funciones antes de que acabe el año y posteriormente vamos a ver cómo se dan las cosas, con las agendas, con los tiempos, es una producción que implica que estén muchas personas, pero nunca hay que cerrar esa oportunidad. La puerta está abierta y vamos a ver cómo pasan las cosas.
Bolero
- Cuándo: 31 de julio y 1 de agosto
- Dónde: Toluca y Texcoco, respectivamente (para los boletos, informes en la Secretaría de Cultura y Turismo del Edomex)