Muestra en San Ildefonso

Exploran el arte disidente y revolucionario de Vlady

La exposición reúne más de 300 piezas, entre éstas el famoso Tríptico Trostkiano, Xerxes y la obra que en 1994 fue censurada, Decendimiento y ascensión; hoy se inaugura

Xerxes (1972-1985), de Vlady, conforma el último núcleo temático de la exhibición.
Xerxes (1972-1985), de Vlady, conforma el último núcleo temático de la exhibición. Foto: Carlos Mora/Segob-AGN

Antes del levantamiento zapatista, el pintor, grabador y muralista rusomexicano Vladimir Kibalchich Rusakov, Vlady, pintaba una serie de murales que le había encargado Patrocinio González Garrido, entonces secretario de Gobernación. En uno de sus lienzos pintaba a una mujer, a quien cuando el 1 de enero de 1994 el Ejército Zapatista de Liberación Nacional se levantó en armas, decidió incorporarle un pasamontañas.

El lienzo que nombró Decendimiento y ascensión fue inaugurado en octubre de ese mismo año junto con otros tres lienzos; sin embargo, al día siguiente fueron desmontados, la pieza que había causado el enojo gubernamental fue colocada en una sala de juntas donde el público no tenía acceso. Tiempo después llegó al Archivo General de la Nación para poderla mostrar.

Dicha pieza ahora forma parte de la exposición Vlady. Revolución y disidencia, magna exposición que se inaugura hoy en el Colegio de San Ildefonso.

Dos de las piezas que forman parte del Tríptico Trotskiano de Vlady.
Dos de las piezas que forman parte del Tríptico Trotskiano de Vlady.

La muestra, que originalmente se iba a presentar en 2020 con motivo del centenario del nacimiento del creador, pero por la pandemia tuvo que atrasarse, reúne más de 300 obras de pequeño y gran formato producidas por el artista a lo largo de su vida. En éstas se da cuenta desde la crítica que hizo al muralismo representado por exponentes de la Escuela Mexicana de Pintura, su separación de la llamada Generación de La Ruptura, los cuestionamientos que hizo sobre el poder y el autoritarismo, hasta parte de su obra relacionada con el erotismo.

En la exhibición curada por Araceli Ramírez, Claudio Albertani y Óscar Molina Palestina, se incluyen obras emblemáticas como Tríptico Trostkiano de 1967-1980 —el cual incluye los lienzos de gran formato Magiografía bolchevique, Viena y El instante—, Reflejos de arquitectura futura de 1968 y las tres piezas de La piel de los amantes chinos, de 1967. Además de Xerxes.

“Las revoluciones cruzan la mirada de Vlady y las revoluciones no solamente en las ideas políticas sino también en las artes plásticas, su obra es testigo del arte y sus transformaciones en el siglo XX; otro aspecto importante es la disidencia, la posibilidad de disentir en el contexto de los cambios sociales, poner en el centro la crítica …. Tener a un revolucionario y disidente en este espacio tan emblemático nos parece oportuno”, apuntó ayer en conferencia de prensa Eduardo Vázquez Martín, coordinador del Antiguo Colegio de San Ildefonso.

Descendimiento y ascensión (1994-1968), del muralista y grabador Vlady.
Descendimiento y ascensión (1994-1968), del muralista y grabador Vlady.

Resaltó que la muestra también se enmarca con el centenario del muralismo mexicano. “El diálogo entre los murales de San Ildefonso y las obras de Vlady, resignifica la obra de Vlady, resignifica la historia del muralismo”, apuntó.

La exhibición incorpora también bocetos de murales y obras, grabados, dibujos de su infancia, apuntes de 80 de los 318 cuadernos que resguarda el Centro Vlady y que revelan simbolismos presentes en la obra del artista. Por ejemplo, el Tríptico Trostkiano se acompaña de una serie de apuntes que permiten conocer más acerca de las tres piezas.

“No es un recuento, la exposición contiene sus obras más importantes… Los cuadernos de Vlady, son diarios que usó para dibujar sobre si vida cotidiana”, detalló Araceli Ramírez.

  • Cuándo: 9 de septiembre de 2022 al 30 de abril de 2023
  • Horarios: martes a domingo de 11:00 a 17:30 horas
  • Las revoluciones de Vlady
  • Vlady íntimo
  • Vlady muralista
  • Vlady y la cátedra Octavio paz: una visión poética