Picadillo Jam, programa enfocado a la difusión del jazz latino en el Instituto Mexicano de la Radio (Imer), llegó ayer a su final en el 109.7 Horizonte FM después de 12 años de existencia y como consecuencia de los recortes presupuestales de los últimos años que ha padecido esta radio pública, que de 254.1 millones de pesos, en 2017, pasó a tener una partida de 163.3 millones en 2021.
“Mi programa estaba dentro de un presupuesto que sufrió muchos recortes, al último ya se me hacía como una cachetada el ofrecimiento que me hacían, que mejor me dijeran hazlo gratis. En el 2021 hubo otro recorte y este año querían hacer otro recorte a lo que me pagaban, dije no. Me comentaron ‘hay dinero para pagarte lo de 2021’, y hacemos contrato por seis meses”, comentó en entrevista con La Razón, Andrés Rosales, conductor del programa Picadillo Jam.
Rosales aseguró que la directora de Producción y Programación del Imer, Maricruz Zamora Rodríguez, intentó incluso buscar algún patrocinio para que el programa continuara; sin embargo, no fue posible.
“Se portó excelente la directora de programación, hasta cuando hablamos se le salieron las lágrimas, porque siempre quiso ese programa, pero hay cosas que rebasan al ser humano. Dijo que iba a tratar de buscar patrocinio, pero lo veo muy difícil porque no quieren embarcarse con ese tipo de patrocinios con la radio pública. Estás sujeto al vaivén del gobierno que entra y en realidad no les interesa la cultura”, lamentó.
A lo largo de 12 años, Picadillo Jam, que se transmitía todos los domingos de 14:00 a 16:00 horas, logró cerca de 620 emisiones, donde se llegaron a escuchar más de siete mil canciones.
Rosales destacó que en el programa trató de difundir la riqueza del jazz latino, la cual considera que parte de dos vertientes; la del jazz estándar latinizado que fue lo que hizo el percusionista cubano Chano Pozo; y el que empieza a incorporar la música tradicional del Caribe: el son montuno, la guajira, la guaracha, el guaguancó, el chachachá, el danzón y el mambo.
“Tienes dos vertientes que te enriquecen para estar difundiendo esta música en el programa que yo tenía, por ejemplo, cosas que no hacían los demás, muchos se iban por el jazz estándar, el Imer creyó en esta propuesta y duró 12 años”, contó.
Entre los músicos entrevistados para Picadillo Jam figuraron el percusionista Poncho Sánchez, así como los pianistas Chano Domínguez y Chucho Valdés; y el saxofonista Paquito D’Rivera.
Mi programa estaba dentro de un presupuesto que sufrió muchos recortes, al último ya se me hacía como una cachetada el ofrecimiento que me hacían, que mejor me dijeran hazlo gratisAndrés Rosales<br>Conductor
Si bien, el programa termina su ciclo en el Imer, Rosales compartió que espera darle continuidad, pero a través de Internet.
“La idea es llevar el proyecto a otro lugar, si es que me agrada porque aquí siempre me dejaban trabajar muy a gusto. Voy a organizar cómo hacerlo en Facebook, porque ya hice un programa de salsa, pero me bloqueaban mucho las canciones por derechos de autor, no quiero que me pase lo mismo; o si lo hago por otro medio y lo anuncio por Facebook”, apuntó.
Dijo que Picadillo Jam no sólo se enfocó en la música sino también en el arte y la cultura. “Era divertirnos, chacotear en el buen sentido de la palabra, regalamos libros, ahí nos ayudaba mucho Pascual Borzelli, le dábamos lectura a la poesía, y aparte la música tiene mucho contenido cultural”, resaltó.
Picadillo Jam no es el único programa que ha salido del Imer, en 2019 dejó de transmitirse Top France de Horizonte, por ejemplo.