El yacimiento arqueológico ubicado cerca de Nápoles, en el sur de Italia, ha revelado una vez más al mundo los tesoros que guarda bajo cada escombro. Durante los trabajos de excavación en curso en la ínsula 10 de la región nueve de la ciudad, se ha descubierto un salón de banquetes adornado con magníficas pinturas que representan escenas de la Guerra de Troya. Además, las excavaciones han revelado dos casas interconectadas, una de las cuales albergaba una panadería y una fullonica (lavandería), con fachadas que ya fueron descubiertas a finales del siglo XIX y que dan a la conocida calle Vía Nola.
Estos trabajos, destinados a mejorar la estructura hidrogeológica de toda la zona, buscan hacerla más resistente y sostenible en una región que enfrenta condiciones climáticas extremas, como fuertes lluvias e intenso calor, que representan una amenaza para el Patrimonio Cultural de la UNESCO.