Noche inolvidable en el Auditorio Nacional

Isaac Hernández: no esperaba este compromiso del público en México

El primer bailarín del Ballet de San Francisco, unas horas después del espectáculo Despertares afirma a La Razón que siente como si hubiera vivido un sueño; convocó a 10 mil asistentes el sábado; ya piensa en la edición de 2023

Al centro,  Isaac Hernández, la noche del sábado, al terminar la función de Despertares. Atrás, de izq. a der., Geo Meneses, Chey Jurado, Los Macorinos, Martin y Facundo Lombard y Chrystyn Fentroy.
Al centro, Isaac Hernández, la noche del sábado, al terminar la función de Despertares. Atrás, de izq. a der., Geo Meneses, Chey Jurado, Los Macorinos, Martin y Facundo Lombard y Chrystyn Fentroy.Fotos: Carlos Mora
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A unas horas de haber vivido una de las noches más emocionantes de su vida, sentir el aplauso de 10 mil almas en el Auditorio Nacional, la euforia y las ovaciones, el primer bailarín mexicano Isaac Hernández aseguró que ve todo como si hubiera sido un sueño, “una realidad alterna que es difícil de asimilar”. No es para más, tras tres años de ausencia, sorteando una pandemia y la falta de apoyos gubernamentales, logró que la gala dancística volviera a la Ciudad de México, incluso confesó a La Razón, “nunca esperamos ese tipo de compromiso del público”, y aunque sabe que fue un acto de valentía que requirió de esfuerzos monumentales, ya piensa en la edición 2023.

“Por eso quise darles las gracias, porque al final, si el público no compra boletos esto no existe”, compartió a este diario ayer, tres haber recorrido la exposición Things We Do for Love, de Erick Meyenberg, en Arte Abierto, Plaza Artz, acompañado por algunos bailarines que participaron en la gala.

Esteban y Misa Kuranaga, ayer.
Esteban y Misa Kuranaga, ayer.Fotos: Carlos Mora

Destacó cómo el público se dejó cautivar. “Me gusta que muchas veces la gente no está acostumbrada a aceptar ese tipo de sentimientos, porque no están en contacto con esa sensibilidad, entonces, estar en el Auditorio, la música, el sonido y las luces te permiten dejarte llevar por esas emociones. Para mí se convirtió todo como en un sueño, tenemos un poco de shock”, dijo.

Sobre Despertares para 2023, respondió con un contundente sí, que el proyecto continúa, “sobre todo ahora cuando el cuerpo aguanta estar entrenando durante dos semanas y hacer un show de alto impacto”.

Se siente satisfecho, porque tanto los artistas que participaron como los espectadores tuvieron la oportunidad de volver “a sentir, de conectarnos emocionalmente”. Eso quedó claro desde el inicio de la gala la noche del sábado:

Estar en el Auditorio, la música, el sonido y las luces te permite dejarte llevar por esas emociones. Para mí se convirtió todo como en un sueño

Isaac Hernández
Primer Bailarín

Isaac Hernández, primer bailarín del Ballet de San Francisco, salió vestido de traje para dar un breve mensaje de agradecimiento a los presentes. El público se desbordó en aplausos como si fuera una estrella de rock, de pop o de reguetón.

“Este proyecto existe en nuestro país gracias a todos y cada uno de ustedes que me acompañan esta noche y compraron un boleto, así que muchas gracias, lo que les tengo preparado es algo muy especial, es un regalo para todos ustedes que siguen creyendo en las artes como una herramienta de transformación social”, les dijo.

“Vamos a vivir una noche inolvidable, disfruten”, fue la frase que cerró su mensaje y la promesa que cumplió, pues por durante las casi dos horas y media que duró la gala, el público experimentó un sin fin de emociones, desde asombro al ver las destrezas de los bailarines, sentirse conmovidos por algún pas de deux de una obra clásica de ballet y hasta melancolía al ver la colaboración entre Chey Jurado, Geo Meneses y Los Macorinos.

Mabinty DePrince y Francesco Frola.
Mabinty DePrince y Francesco Frola.Fotos: Carlos Mora

El primer número del show brindó un ambiente alegre y lleno de energía con la agrupación Ghetto Funk Collective, la cual trajo al escenario la cultura musical del funk, el soul y el jazz, compaginada con un baile de libertad y de gozo; después, Isaac Hernández, junto con Mayara Magri, el Royal Ballet, deleitó con un clásico del ballet, Don Quixote, fragmento que sorprendió al ver los impecables saltos del artista.

La emoción de los presentes fue en aumento cuando apareció en el escenario el español Chey Jurado, quien por primera vez participó en Despertares. El reconocido bailarín, quien ha destacado en el hip-hop, bboying, popping y lo-cking, hipnotizó con la pieza The Weight of Gild, en la cual demostró el poder que tiene el cuerpo para expresar, se le veía acostado moviéndose, a veces sutilmente, otras de manera arrebatada.

Después de que Chey Jurado quitara el aliento, Esteban Hernández y Misa Kuranaga conmovieron y causaron sorpresa con la ejecución de Tchaikovsky Pas de Deux, del reconocido coreógrafo George Balanchine, una pieza romántica llena de giros y levantamientos; Hernández emocionó con sus grandes saltos y dobles tours en L”air; y Kuranaga parecía un ser etéreo al ejecutar piruettes y saltos, e incluso, al ver el movimiento de sus brazos.

Los gemelos Lombard.
Los gemelos Lombard.Fotos: Carlos Mora

Con la coreografía Awáa, de Aszure Barton, los asistentes también se quedan boquiabiertos. Tres bailarines ejecutaron un fragmento en el que estuvo presente la danza contemporánea y africana.

Mientras que con Blake works, de William Forsythe, el público suspiró. Isaac Hernández de vuelta en el escenario, pero ahora con Chrystyn Fentroy, conmovió con esta coreografía que es una carta de amor al ballet. Acto seguido Mabinty DePrince y Francesco Gabriele Frola bailaron Diana & Acteon.

Tras el intermedio, el comienzo de la segunda parte del show también estuvo lleno de energía, con los gemelos argentinos Martin y Facundo Lombard, quienes con la música de Astor Piazzolla y la pieza Libertango emocionaron al público, que miraba el movimiento de sus pies sobre una tarima. Los bailarines también estaban sorprendidos de ver a 10 mil almas mirándolos con suma atención, así que cuando terminaron su número se tomaron una selfie y decidieron hacer una dinámica con los asistentes, los invitaron a que crearan música con sus pies y palmas, mientras intentaban dirigirlos como a una orquesta.

Brooklyn Mack y Misa Kuranaga.
Brooklyn Mack y Misa Kuranaga.Fotos: Carlos Mora

Una coreografía que también provocó suspiros fue Hurry up, We are Dreaming!, a cargo de Dores André y Esteban Hernández. Una pieza onírica.

Sin duda, el estreno de Veinte años, con Chey Jurado, la cantante Geo Meneses y con música en vivo de Los Macorinos, erizó la piel y se robó la noche. La voz de la intérprete originaria de Oaxaca, la desgarradora letra “Qué te importa que te ame/Si tú no me quieres ya/El amor que ha pasado/No se debe recordar”, Los Macorinos tocando en vivo y la manera en que el bailarín le puso danza la canción con movimientos sutiles, pero también saltos y giros que se fundían con el resto de los elementos, conmovieron a los presentes.

Y si ya el corazón vibraba, el final de Despertares, también fue emotivo. Isaac y Esteban Hernández bailaron una pieza que se ha convertido en tradición en el espectáculo, My Way, de Stephan Toss con música de Sinatra.

Esteban e Isaac, al bailar My Way.
Esteban e Isaac, al bailar My Way.Fotos: Carlos Mora

Cuando aparecieron todos los bailarines participantes en el escenario para despedirse, el ambiente de fiesta volvió y los asistentes se desbordaron en aplausos y gritos, e incluso cuando Isaac Hernández se acercó al público, la emoción fue tanta que varias personas quisieron acercarse para saludarlo. Una joven fue hacia él para que le diera un autógrafo y el artista jalisciense cumplió el sueño de esa chica.

Ni los bailarines ni el público parecían quererse ir, así que los aplausos y baile seguían, demostrando que hay un público que quiere ver danza.

Geo Meneses: “Chey Jurado y yo unimos nuestras almas”

La cantante oaxaqueña Geo Meneses aún siente sus emociones a flor de piel al recordarse sobre el imponente escenario del Auditorio Nacional, con Chey Jurado y Los Macorinos, interpretando la pieza , la cual resume como una unión de almas.

Cuando se le pregunta, ¿cómo fue trabajar con Chey Jurado?, se emociona y como queriendo sintetizar todo lo que sintió dice: “Fue una unión de almas”. Al soltar esa frase, enseguida uno recuerda el abrazo que se dieron antes de comenzar a bailar juntos.

Meneses, quien preparó ese número con los artistas vía Zoom, destacó del bailarín español su gran capacidad artística, la cual consideró que fue fundamental para lograr conmover a 10 mil personas. “Tiene un gran espíritu, no puedes dejar de verlo cuando baila”, destaca.

Si bien ella se dedica a la música y es poseedora de una extraordinaria voz, contó que no ha sido ajena a la danza, incluso en su niñez quiso ser bailarina, por eso lo que vivió en el Auditorio Nacional con Despertares, fue regresarle a esa niña que soñaba con algún día ser artista. Y claro, también desea volver a ser parte de la gala.