El primer actor Ignacio López Tarso se reinventa en la pandemia de Covid-19 y a sus 96 años sigue haciendo lo que le apasiona: actuar, aunque sea de manera virtual. En entrevista con La Razón, el histrión aseguró que, pese a que hace más de año y medio que no ha podido pisar un escenario, se mantiene activo y trabajando en nuevos proyectos, el más reciente, la lectura dramatizada de El canto del cisne, de Antón Chéjov, la cual presenta del 5 al 7 de marzo vía streaming y desde la sala de su casa.
“Me siento afortunado de estar vivo y seguir haciendo lo que amo; estaría en absoluta desgracia si mi capacidad ya no me diera posibilidad de no estar en un escenario, sería un golpe terrible en mi vida darme cuenta que ya no puedo aparecer frente a un público con una obra aprendida de memoria ¡qué bueno que puedo hacerlo!”, celebró previo a uno de sus ensayos.
“Mientras tenga memoria, piense y razone, pueda estudiar un personaje y expresarlo, me siento vivo”, agregó el protagonista de la icónica película Macario, quien además afirmó que todo el tiempo busca trabajar su capacidad de memorización, pues cuando alguien la deja ésta se atrofia “te dediques a lo que sea”.
“Ahora que llevo ya año y medio sin pisar un escenario, no he dejado de ejercitarla con todos estos proyectos virtuales. Lo que será problemático será recuperar el volumen cuando regrese a los escenarios, decir los diálogos sin que parezca que estás gritando. Antes de ello tendré que ir a practicar a los espacios”, remarcó el histrión.
La memoria es un elemento clave de El canto del cisne, en la cual López Tarso da vida a Vasili Vasilievich, un actor veterano que hace una revisión de su vida como intérprete junto a su amigo Iván Ivanovich, su apuntador, quien es encarnado por Juan Ignacio Aranda, hijo del histrión.
“El canto del cisne está basada en una leyenda: se dice que esta ave nunca canta y no hace jamás ruido alguno, salvo cuando se va a morir, en ese instante entona por primera y única vez; eso lo aprovechó Chéjov para retratar lo que le pasa a ese actor”, explicó.
Extraño mucho el teatro, me incomoda no estar sobre el escenario; me hace falta estar ante la presencia del público, ser estimulado por las reacciones de las personas; pero en Internet hemos tenido una audiencia estupenda, que ha recibido de maravilla lo que le hemos dado y con la queIgnacio López Tarso<br>Primer actor
hemos entablado pláticas muy interesantes
Respecto al trabajo del apuntador, López Tarso recordó que en sus días de estudiante sus profesores desecharon aquella figura, la cual se encarga de ayudar a los histriones cuando se les olvidan sus diálogos y que estaba, con el libreto, alerta bajo el escenario.
“Quisieron hacer las cosas de memoria, lo cual a los antiguos actores les pareció una bestialidad, pues se quejaron de que para eso estaba la concha del apuntador”, recordó.
López Tarso aseguró que ha memorizado cada una de las puestas escénicas que ha montado y destacó que las de William Shakespeare han sido algunas de las más difíciles: “Él es un dramaturgo formidable, el mejor de la historia y aprender El Rey Lear me costó como no tienes idea, al igual que La Tempestad, Otelo y Macbeth”, señaló.
Destacó la complejidad que representa el teatro en verso español, el cual dijo debe ser aprendido a la perfección, pues el artista que lo escenifica no debe depender en ningún instante del apuntador, “porque el verso se corta si se taja la idea; no hay que renglonearlo cuando se recita, eso es pésimo y se escucha horrendo… y el actor que rengloneé en el teatro en verso, ¡que lo ahorquen!”, expresó.
Arte digital
- Macario
- Leonardo da Vinci y la máquina de volar
- Melville en Mazatlán
- El de la triste figura
AYUDAR A LOS COLEGAS. Ignacio López Tarso detalló que todo lo recaudado en la función del domingo 7 de marzo será donado a La Casa del Actor, el centro de retiro de los artistas afiliados a la Asociación Nacional de Actores (ANDA).
“Los que viven ahí son colegas que ya no pueden trabajar y que se han dedicado a este arte durante toda su vida; no ganan dinero y necesitan apoyo. Son compañeros muy queridos y respetados, la mayor parte de ellos; hay muchos que se cuelan ahí, pero que no tienen el mérito para estar; sin embargo, hay a quienes sí admiro y les dedicaremos esa presentación. Sé que el beneficio económico será poco, pero es algo”, detalló el primer actor.
Respecto a la reapertura de los teatros en la Ciudad de México, a partir de esta semana, López Tarso celebró los intentos de reactivación económica que están haciendo las autoridades capitalinas; sin embargo, calificó como insuficiente el limitado aforo de 20 por ciento.
“Lo del cupo no está bien pensado, que sea menos de la mitad del público el que pueda asistir es muy poco, se debe corregir”, sentenció López Tarso.
El canto del Cisne
- Elenco: Ignacio López Tarso y Juan Ignacio Aranda
- Cuándo: 5, 6 y 7 de marzo
- Hora: viernes y sábado, 20:00 horas; domingo, 13:00 horas
- Dónde: boletopolis.com