Artes escénicas de luto

Muere Alejandro Luna, creador que revolucionó la escenografía

Fallece a los 83 años de edad, el también destacado arquitecto e iluminador; deja un legado en las más de 300 obras en las que participó; se le rendirá un homenaje póstumo en Bellas Artes, el próximo viernes

Alejandro Luna, considerado uno de los mejores escenógrafos de todos los tiempos de México.
Alejandro Luna, considerado uno de los mejores escenógrafos de todos los tiempos de México. Foto: Cuartoscuro

Alejandro Luna, considerado uno de los mejores escenógrafos de todos los tiempos de México, maestro de la perspectiva y la luz, falleció ayer a los 83 años de edad, dejando una pérdida irreparable en las artes escénicas. Su legado atraviesa desde montajes hasta teatros que hoy son fundamentales en la vida cultural del país. A raíz de su trabajo hay un antes y un después en México, se ha destacado.

La noticia la dio a conocer la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto: “Lamento el sensible fallecimiento del arquitecto y destacado escenógrafo mexicano Alejandro Luna, quien por más de 50 años iluminó y ambientó los más diversos escenarios de nuestro país y el mundo”, señaló la funcionaria en su cuenta de Twitter.

Más tarde, se informó que se le rendirá un homenaje póstumo el próximo 16 de diciembre, en el Palacio de Bellas Artes, a las 12:00 horas.

Al darse a conocer la noticia de su deceso, en el ámbito del teatro, la danza y la ópera, lo despidieron.

“Día de luto en la escena nacional: ha muerto Alejandro Luna, en mi opinión el mejor escenógrafo mexicano de todos los tiempos. Todas las producciones memorables de mi gestión artística en la Ópera de Bellas Artes fueron suyas. ¡Salve, Maestro! Abrazo cariñoso, querido”, expresó Gerardo Kleinburg, narrador y promotor musical.

Lamento el sensible fallecimiento del arquitecto y destacado escenógrafo Alejandro Luna, quien por más de 50 años iluminó y ambientó los más diversos escenarios de nuestro país y el mundo
Alejandra Frausto, Secretaria de Cultura

Kleinburg no exageró al recordar de esa manera a Alejandro Luna, quien como diseñador escénico, escenógrafo e iluminador participó en más de 300 obras teatrales y óperas en México, Estados Unidos, América del Sur, Asia y Europa. Proyectos a través de los cuales trazó nuevas rutas sobre la escenografía al hacerla multidisciplinar e integral. Además de crear espacios dinámicos.

Juan José Gurrola (1935-2007), consideraba que el trabajo de Luna era “un mundo contenido, equilibrado, cuidadoso y fraternal. La artesanía de escenógrafo empieza en México con este señor; antes todos eran refritos olorosos a viejo teatro”, de acuerdo con el historiador de arte Diego Montoya, en el texto “Alejandro Luna: momentos de una escenografía integral”.

Montoya en ese artículo remarcó que en la obra del escenógrafo hubo por lo menos tres momentos emblemáticos, en el montaje El atentado, de 1975, en la que incorporó elementos atípicos como la proyección de fotografías; Y con Nausíscrata ¿qué?, de 1979, en el cual se enfocó en el color del vestuario y la estructura escenográfica como un solo elemento; y la cinta Frida. Naturaleza viva, de 1984, de Paul Leduc, en la cual se aprecia su interés por la escenografía multidimensional.

Para Luna, la escenografía no era un elemento más de una puesta en escena, sino el espacio “en el que ocurre el montaje de teatro, ópera o danza. Donde se contienen los momentos exquisitos y privilegiados en que actores, bailarines, cantantes comparten con el auditorio, ahí respiran juntos el mismo aire. Es el arte”, apuntó el arquitecto a La Razón en 2016, año en el que recibió la Medalla Bellas Artes.

Alejandro Luna, un gran artista, quien revolucionó la escena latinoamericana con su inteligencia, sensibilidad y profesionalismo. Un creador querido y reconocido
Lucina Jiménez, Directora del INBAL

Aunque su trabajo destacó en el teatro, la danza y la ópera, decía que en ninguna se había sentido suficientemente cómodo. “No es un lugar cómodo hacer teatro, es un ámbito muy difícil, duro en el que uno tiene que dedicarle mucho tiempo y cuando ves el resultado es un momento muy satisfactorio, pero antes es pura chamba”, compartía.

Para Alejandro Luna, el trabajo en equipo era fundamental en un montaje, de ahí que también fuera recordado como un gran maestro.

“Ha partido una figura paradigmática del teatro, maestro de múltiples generaciones de hacedores de la escena y uno de los grandes revolucionadores de las artes escénicas en nuestro país: Alejandro Luna Ledesma (1939-2022), importante escenógrafo, iluminador y catedrático”, resaltó el Sistema de Teatros de la Ciudad de México.

Mientras que Lucina Jiménez, directora del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), destacó: “Transformó el teatro mexicano de la segunda mitad del siglo XX. Artista de la iluminación y el diseño escénico, gracias a él nacieron espacios bajo nuevas visiones. Maestro de generaciones”.

Se le consideraba el “alquimista del teatro”, arte en el cual se inició su hijo, el actor Diego Luna, quien ha contado cómo pasó su infancia en los teatros mientras su papá trabajaba, una experiencia fundamental para que luego eligiera la carrera de histrión.

Alejandro Luna legó sus conocimientos en arquitectura, realizó proyectos y asesoró la construcción de más de 65 teatros, entre los cuales destacan los del Centro Cultural Universitario de la UNAM: el Juan Ruiz de Alarcón y la Miguel Covarrubias, por ejemplo.