Ópera que une a Philip Glass y Allan Poe se estrena en México

La caída de la casa Usher es un cuento de Edgar Allan Poe donde está presente el terror psicológico, la melancolía, la muerte y la soledad. Un relato que el aclamado compositor Philip Glass llevó a una ópera de cámara hace 30 años y que ahora se estrena en México.

La música compuesta por Glass tiene la genialidad de condensar en 90 minutos las atmósferas y emociones que planteaba el escritor con una alta dosis de suspenso que llevará a los espectadores a vivir una experiencia distinta a un habitual espectáculo operístico, consideró en entrevista con La Razón Laura Reyes, directora concertadora del montaje.

“Cuando las óperas son de tres horas, cinco horas, uno tiene que sentir mucho más que gusto, una compaginación con el tema, el compositor. Lo que hace muy bien Philip Glass, es que maneja muy bien el momento de la modernidad, que todos tenemos una vida muy ocupada, encuentra la manera de expresar esta historia en 90 minutos, una vez que comienzas a transitar por la historia tienes la necesidad de seguir, porque quieres saber qué va a pasar, cómo va a evolucionar el tema, te mantiene en suspenso”, destacó la también flautista.

Fue en 1987 cuando Philip Glass, cuyas óperas se representan en las principales casas de ópera, compuso La caída de la casa Usher, obra con libreto de Arthur Yorinks, que sigue el relato en el que Allan Poe cuenta la historia de los hermanos Roderick (tenor Miguel Zazueta) y Madeline Usher (soprano Mariana Flores), el primero quien vive entre la locura y la melancolía; y la segunda en una catalepsia que la mantiene inmóvil.

Los acontecimientos que ocurren en la melancólica casa Usher se cuentan desde la mirada de William, el amigo al que Roderick llama para que lo acompañe en la enfermedad.

“A nivel escénico es muy intenso. Van a haber efectos visuales; hay algunos elementos que son icónicos en la cultura estadounidense, el ghostlight, que es una lámpara que se usa en los teatros y salas de Estados Unidos; la estará cargando Madeline, es como si ella fuera un fantasma, es para despertar la curiosidad, la duda: ¿es Madeline un ente vivo o muerto?, ¿estamos viviendo un hecho real o es una alucinación?, ¿es una alucinación de William, el amigo invitado del hermano?, o ¿existe Madeline o nosotros en el público la estamos creando?”, comentó la directora.

Laura Reyes definió la música de Philip Glass para esta ópera como minimalista y en la que hay una constante repetición, que de pronto tiene momentos de suspenso, lo cual dejará atrapado al público.

“Mediante la repetición de patrones melódicos, armónicos y rítmicos a veces nos mantiene en una atmósfera plana sin emoción por parte de la música, y de repente, ¡pum!, te sorprende con algo que va a pasar; o de pronto te genera suspenso , porque se está repitiendo la misma cosa, es como cuando escuchas una gota de agua caer, y la oyes mucho tiempo, te va generando ansiedad o ganas de que ya no se oiga, esas sensaciones las va provocando Philip Glass a lo largo de esta pieza”, explicó Reyes.

Mediante la música para una orquesta reducida de 12 músicos, se retrata la melancolía o la parte romántica de Roderick, a través de instrumentos como la guitarra, agregó.

La pieza representa todo un reto para los cantantes, principalmente los protagonistas.

“La soprano principal, quien interpreta a Madeline, no tiene texto; entonces, es más difícil memorizar melodías sin texto, tiene que estar en una vocalización continua con la letra A; va demasiado agudo. Para el tenor principal, el reto es cambiar de estados de ánimo, jugar el papel de loco, porque a veces como el personaje está enfermo, está en momentos de mucha tranquilidad, sonriendo y feliz, y de repente ya está enojado”, abundó.

La caída de la casa Usher se presenta los próximos 30 de septiembre y 1 de octubre en la Sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario como parte del Festival Cultura UNAM, el cual inaugurará.

Otros montajes que destacan del encuentro son El lago de los cisnes en 3D, Leonora (oratorio sonámbulo en las tierras de España) y el estreno en México de la pieza Extracto de Orbo Novo.