Rushdie pasó 9 años escondido

Salman Rushdie se recupera tras ataque

Una jueza ordenó que Hada Matar, el atacante, permanezca detenido sin derecho a fianza, luego de que el fiscal consideró que fue una agresión dirigida y planificada.

El escritor, durante XV aniversario de la Casa Refugio Citlaltépetl, en 2014.
El escritor, durante XV aniversario de la Casa Refugio Citlaltépetl, en 2014. Fotos Cortesía: Pascual Borzelli Iglesias

El escritor Salman Rushdie está “en camino a la recuperación”, informó ayer su agente, dos días después de que el autor de Los versos satánicos sufriera heridas graves tras ser apuñalado durante una conferencia en Nueva York.

El sábado se informó que los médicos le retiraron un respirador y el reconocido escritor pudo hablar y bromear. El agente literario Andrew Wylie advirtió que, aunque la “condición de Rushdie va en la dirección correcta”, su recuperación será un proceso largo. Rushdie, de 75 años, sufrió daños en el hígado y tuvo lesiones en los nervios de un brazo y un ojo. Wylie dijo previamente que es probable que el escritor pierda el ojo afectado.

“Aunque las lesiones que le cambiaron la vida son graves, su habitual sentido del humor desafiante permanece intacto”, dijo el hijo de Rushdie, Zafar Rushdie, ayer en un comunicado, en el cual enfatizó que el autor permanece en estado crítico. La declaración en nombre de la familia también expresó su gratitud por los “miembros de la audiencia que valientemente saltaron en su defensa”, así como por la policía, los médicos y “la efusión de amor y apoyo de todo el mundo”.

Hadi Matar, de 24 años, de Fairview, Nueva Jersey, se declaró inocente el sábado de los cargos de intento de asesinato y asalto en lo que un fiscal calificó como “un ataque dirigido, no provocado y planificado previamente” en la Institución Chautauqua.

El ataque fue recibido con conmoción e indignación mundial, junto con elogios para el autor quien, durante más de tres décadas, ha soportado amenazas de muerte por Los versos satánicos de 1988, libro que provocó la ira de algunos musulmanes que consideran elementos de la novela como blasfemias. Rushdie pasó nueve años escondido bajo un programa de protección del gobierno británico.

Autores, activistas y líderes mencionaron la valentía del escritor y su defensa de la libertad de expresión.