Traduce a la música el encuentro de los argonautas con las sirenas

El joven compositor Ismael Morales estrena hoy en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes su pieza Alotropías: Brutes, la cual está basada en el libro homónimo del escritor francés Pascal Quignard, donde se reflexiona acerca del integrante de los argonautas que fue hechizado por los cantos de las sirenas. Será interpretada por el Ensamble Cepromusic, como parte de los recitales Aliqua, música contemporánea de cámara y Las funciones relajadas del INBAL.

En entrevista con La Razón, Ismael Morales detalló que Alotropías: Brutes forma parte una trilogía de obras para contrafagot que explora el concepto químico de la alotropía desde un enfoque musical: “generar estructuras y dotaciones distintas a partir de los mismos elementos musicales”.

“En el caso de esta pieza, el contrafagot representa a Butes, mientras que el instrumento abierto, a la pasión, la locura, el deseo, aquella verdad que nunca es revelada por completo pero que puede ser escuchada a través del sonido desconocido e indomable”, agregó el compositor.

El autor detalló que Alotropías: Brutes está dividida en tres secciones: la primera representa el encanto y el hechizo, donde sólo existe deseo; la segunda representa la vuelta a la razón, el orden y lo humano; y la tercera es el retorno voluntario hacia lo animal.

De acuerdo con el relato mitológico, cuando Jasón y los argonautas pasaron por la Isla de las sirenas, éstas cantaron y los hechizaron, provocando que todos remaran rumbo a ellas. El dios Orfeo ejecutó un contra canto que rompió el embrujo y les devolvió la cordura para escapar. Sin embargo, ya libre y en pleno uso de razón, Butes decide arrojarse al mar y entregarse a las sirenas. Afrodita, quien presencia todo, lo salva y se entrega a él.

“Según Quignard, esta acción revela una vuelta a lo animal, al deseo reprimido, pero también a la búsqueda de aquellos sonidos primitivos que llegan a lo más profundo del alma, porque, a diferencia de los sonidos humanos y ordenados, la música primigenia está más cerca de la verdad, a diferencia de la palabra que tan solo puede describirla”, explicó Ismael Morales.

Respecto al debut de su pieza en Bellas Artes, el compositor afirmó sentirse honrado de que ésta “se interprete en un recinto tan emblemático, por uno de los ensambles de música contemporánea más importantes”.

Asimismo, aseguró que considera de suma importancia que otros compositores conciban piezas para el contrafagot, para que así puedan ser explotadas al máximo sus posibilidades técnicas y sonoras. “Por ello trabajar Alotropías: Butes con Ángel Flores, el contrafagotista del Ensamble Cepromusic fue todo un privilegio”, remarcó.

“El país tiene una gran tradición compositiva y actualmente hay muchos compositores haciendo cosas e interesantes; creo que es importante que existan espacios donde los jóvenes podamos presentar nuestro trabajo. Es alentador que ensambles como el Cepromusic estén trabajando constantemente para estrenar nuestras obras, comisionando piezas y promoviendo la música contemporánea en México. Me parece que su labor es imprescindible”, finalizó Ismael Morales.

Aliqua Ensamble Cepromusic