La poeta, narradora y promotora cultural cubano-mexicana Odette Alonso (Santiago de Cuba, 1964), quien reside en México desde 1992, ha publicado varios libros, entre los cuales destacan la novela Espejo de tres cuerpos, los cuadernos de relatos Con la boca abierta y Hotel pánico y, asimismo, los poemarios Insomnios de la noche del espejo, Víspera del fuego, Último día de un país y La fiesta del dolor y otros cantos. Ostenta, entre otros galardones, el Premio Internacional de Poesía Nicolás Guillén 1999, Premio Nacional de Poesía LGBTTTI Zacatecas 2017 y el Premio Clementina Isaura de Poesía 2019.
Lo que transcurre (Ediciones Furtivas, 2023) es la más reciente incursión lírica de Odette Alonso donde elucida el acontecer como un acto de espera. Se detiene en las estaciones a la intemperie y describe instantes abrazados a turbadas peticiones. Odette siempre en los espejismos por su Isla a través de versos leves y de cadencia sosegada que bordan el silencio y ahuyentan las convulsiones. El ocurrir arropado en la nostalgia y la memoria: “Agazapado tras el manto de la bruma / llega el amanecer / la arena hace montículos que el viento desperdiga. / Todo adiós es el mismo/ repetido / la isla que se hunde / el beso ajeno”.
“Este poemario lo escribí antes de los que he publicado recientemente: Últimos días de un país y La fiesta del dolor y otros cantos. Retomé estos versos archivados y me di cuenta de muchas recurrencias presentes en mi obra poética: la pérdida, la nostalgia, el deseo, la búsqueda de la identidad y, por supuesto, Cuba. Fue acogido en Miami por Ediciones Furtivas, una editorial emergente abocada en la difusión de la literatura cubana. Me satisface formar parte de su catálogo”, dijo a La Razón, Odette Alonso, coordinadora del proyecto Bulevar Arcoíris de México.
¿Poemario de sentido metafísico con ecos de “Proverbios y cantares” de Antonio Machado? Los lectores descubren caminos que a veces no están tan claros ni tan conscientes para el autor. Yo no reconocería influencia de Machado, quien fue uno de mis poetas favoritos, antes incluso de saber que yo sería poeta. Tal vez, la culpa es de Serrat por aquel disco donde musicalizó sus poemas. Lo leí mucho, me gustaba su sencillez, su poesía descriptiva. Tal vez, por ahí anden ecos machadianos.
La vida es un cúmulo de nostalgia que no siempre es doloroso. Salir de Cuba, para mí, es de las mejores cosas que me han pasado en la vida
¿Lazos y afinidades con Últimos días de un país (2019) y La fiesta del dolor y otros cantos (2021)? Con Últimos días de un país, sin duda. Lo que transcurre es anterior y en su momento, le “prestó” algunos poemas a Últimos días..., los cuales ahora regresaron a su conjunto original. Las indagaciones acerca de una casa, una familia, un país, le son comunes a ambos poemarios. Con La fiesta del dolor..., no lo creo, ése es una reunión de poemas viejos que no tienen muchas coincidencias con los actuales.
¿Presencia de espectros familiares en búsqueda de identidad? Creo que la identidad de esos espectros está clara, tal vez es la voz poética quien busca afinidades con ellos, intenta reconocerse en una estirpe, cuestiona si realmente pertenece a ese linaje. Quien narra es el fantasma. Bifronte: a veces ángel, a veces fuerza bruta.
¿El exilio, centro de una nostalgia arropada en el dolor? La vida es un cúmulo de nostalgia que no siempre es doloroso. Salir de Cuba, para mí, es de las mejores cosas que me han pasado en la vida; pero, tal vez para la voz poética, este suceso no resulta tan venturoso; por eso sigue indagando en ese pasado, en esos escenarios que siente ajenos o perdidos, en ese cuadro de familia donde se busca a sí misma. La mirada es exterior, observa desde la lejanía, y así reconfigura el recuerdo.
¿Cuba, isla extraviada, huérfana, que sólo puede ser configurada metafóricamente? Hay muchas Cubas. La metafórica, la de este libro, es una reinvención. Una Cuba que no existe y que tal vez nunca existió ni existirá, la remembranza de un sueño o de una ilusión. ¿Será realmente Cuba o pudiera ser cualquier otro lugar del que se parte y luego se reconstruye, vagamente, en la memoria? La poesía es atemporal y ubicua, es decir: universal. En eso que, para los lectores de la isla, pudiera ser Cuba, otros encontrarán referencias personales, sin importar en qué latitud se encuentren ni qué historia de vida tengan. Eso es lo importante, lo trascendental.
¿El “terco egoísmo de la felicidad” está enraizado con el desconsuelo de los rebotes del tiempo? No hay desconsuelo en quienes se van, sino en quienes se quedan. Al menos en el libro es así: quienes lloran son las madres; los hijos parten sin dudarlo, se van soñando “con otros cielos y otra casa” y miran la lluvia desde nuevas ventanas. Pareciera un destino inalterable. Sin embargo, del otro lado del mar vendrán las remembranzas, la vuelta al pasado. El tiempo es esa noción que lo recorre todo, la esencia, en fin, de ‘lo que transcurre’.
Palabras de Carlos Pintado
Celebro que este poemario de Odette transcurra con esa advertencia que nos hace Margaret Atwood y que Odette usa como uno de los pórticos de este libro: «No se mira hacia atrás en el tiempo sino hacia abajo, a través de él, como en el agua». He aquí una de las claves para leer o comprender mejor el libro. Odette mira hacia abajo, pero no en actitud de sumisión sino de altura, porque lo que transcurre con el libro, poema a poema, verso a verso –Everything Everywhere All at Once–, es la visión de una poeta que está situada en muchos sitios a la vez, geográficos y temporales. […]
Si en otros libros de Odette la poeta se lanzaba al centro del ruedo y desde allí lo incendiaba todo como una única protagonista, venerada y observada por todos, aquí ha elegido instalarse en los contornos en fuga, en el sepia de las sombras; intercambiar protagonismo por transfiguración. Ser ella la que observa. Odette en este libro es ella la que […] recoge la carcoma y desaparece, la que aplaude en las gradas y desaparece, la que se perfila en una ventana. […]
- Autora: Odette Alonso
- Género: Poesía
- Editorial: Furtivas
- Cuándo: sábado 2 de septiembre
- Dónde: Feria Internacional del Libro del Estado de México (FILEM) (Centro de Convenciones, ubicado en Toluca)
- Horario: 17:00 horas