Gana su sexto Wimbledon

En 13 años Djokovic iguala a Nadal y Federer con 20 Grand Slams

Novak derrota al italiano Matteo Berrettini en cuatro sets 6-7 (4), 6-4, 6-4 y 6-3; se espera su participación en Tokio; fue la final número 30 de Grandes en la carrera del serbio

Nole, en el partido de ayer, ante el italiano en Wimbledon.
Nole, en el partido de ayer, ante el italiano en Wimbledon. Foto: AP

Novak Djokovic igualó a sus eternos rivales Roger Federer y Rafael Nadal al adjudicarse su título 20 de Grand Slam al derrotar 6-7 (4), 6-4, 6-4 y 6-3 a Matteo Berrettini en la final de Wimbledon.

Le bastaron 13 años a Novak para llegar a conquitsra sus 20 Grandes, pues su primer título lo obtuvo en 2008 y el más reciente en 2021 (ayer). Nadal se tardó 15 años y a Federer le bastaron 20 años, su último Grand Slam lo obtuvo en 2018.

El número uno del mundo se consagró campeón en All England Club por tercera edición consecutiva y sexta en total.

Incrementó su colección de trofeos de Grand Slam, una que incluye nueve títulos del Abierto de Australia, tres del Abierto de Estados Unidos y dos del Abierto de Francia, para empatar a sus dos adversarios por la máxima cantidad de majors ganados por hombres en la historia del tenis.

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“Tengo que rendir un enorme tributo a Rafa y Roger. Son leyendas de nuestro deporte. Son los dos jugadores más importantes que he enfrentado en mi carrera. Ellos son, creo yo, la razón de que yo esté aquí. Me han ayudado a darme cuenta de lo que necesitaba hacer para mejorar en todas las facetas del juego, mentalmente, físicamente y tácticamente”, dijo el serbio de 34 años al término de la competencia.

Federer tuiteó un mensaje de congratulaciones tras el desenlace. “¡Una actuación maravillosa, bien hecho!”, escribió.

Nole también se convirtió en el primero desde Rod Laver en 1969 que conquista los tres primeros grandes en una temporada.

Podría barrer los cuatro títulos de Grand Slam en un año (algo que ningún hombre ha conseguido desde Laver hace 52 años) en el US Open; comenzará el 30 de agosto.

“Espero poder lograrlo, voy a intentarlo. Estoy en muy buena forma y jugar bien y con el mejor nivel en los Grand Slams es mi máxima prioridad ahora en esta etapa de mi carrera. Esto no para aquí”, dijo Djokovic al dirigirse al público en la Cancha Central.

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Fue la final número 30 de Grand Slam en la carrera de Djokovic, apenas una por detrás del récord de Federer y la primera para Berrettini, un italiano de 25 años que era el séptimo cabeza de serie del torneo en superficie de césped.

Éste fue un domingo trascendental para el deporte italiano en Londres. Su selección nacional de futbol enfrentaba por la noche a Inglaterra en el estadio Wembley en la final del Campeonato Europeo.

Con Marija Cicak al mando, la primera mujer como juez de silla en la final masculina de un torneo que se disputó por primera vez en 1877, el choque empezó con un inusual día soleado.

Djokovic es un fajador y acabó amansando el ímpetu de Berrettini, además de ganarse el apreció de los espectadores.

Culminada la tarea, Djokovic se tiró de espaldas sobre el césped, con los brazos y piernas extendidas mientras escuchaba su nombre se coreado por los asistentes al estadio central de Wimbledon.

El serbio llega a la trigésima definición para ser apenas el segundo jugador en arribar a esa cifra tras Roger Federer (31) en un podio que lo completa Rafael Nadal (28).
El serbio llega a la trigésima definición para ser apenas el segundo jugador en arribar a esa cifra tras Roger Federer (31) en un podio que lo completa Rafael Nadal (28).

Ha atrapado ocho de los últimos 12 grandes, todos desde que cumplió los 30 años.

Ante las persistentes preguntas de años recientes sobre cuándo la nueva generación podrá dar un paso para frenar a los Tres Grandes, resulta que Djokovic por sus propios medios ha contenido a los novatos.

Acumula marca de 21-0 en los tres majors de este año. En las finales, venció a un trío de veinteañeros que están en el Top 10: Medvedev, en las pistas duras de Australia, Tsitsipas y ahora Berrettini en la hierba, por lo que aún no surge quién lo pueda vencer.