Luego de cinco años, Fernando Valenzuela consiguió su primera investidura al Salón de la Fama del Beisbol Mexicano. Junto al primer tricolor en conseguir una victoria en la Serie Mundial, entraron el exjugador de los Diablos Rojos del México, Daniel Fernández; Ricardo Sáenz, el pelotero que más dobles ha dado en la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) con 496 y Cuauthémoc Rodríguez, directivo de los Tecolotes de Nuevo Laredo por más de 20 años, equipo con el que consiguió dos títulos, cinco finales y 15 postemporadas.
“Es importante que el beisbol siga adelante, es un deporte muy familiar, con el apoyo de todos, la pelota trascenderá a las futuras generaciones”, comentó el Toro Valenzuela al subir al estrado a recibir la placa con la que quedará perpetuado en el Parque Fundidora de Monterrey.
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El nacido en Navojoa hace 59 años, encabezó la votación de la nueva generación de eternos del Rey de los Deportes mexicano con 343 sufragios, mientras que en segundo lugar estuvo Fernández (211) y en tercero Sáenz (102), como los tres jugadores que entraron. Por su parte, Rodríguez lideró a los directivos con 287, 39 más que su principal competencia, Enrique Mazón, fundador de los Naranjeros de Sonora en la Liga Mexicana del Pacífico.
Este proyecto se materializó en febrero de 2019, en su reinauguración, pero las votaciones se dieron en 2014 por distintos problemas para que se llevaran a cabo.
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El periodista Alejandro Aguilar Fray Nano fue el que ideó el proyecto del Salón de la Fama que duró a partir de 1973 hasta 2011, pero debido a que el Parque Fundidora cambió de sede, se suspendió.