Entre lágrimas, Kylian Mbappé abandonó la cancha por una aparente lesión de tobillo que empañó la coronación del París Saint-Germain en la Copa de Francia.
El PSG se impuso 1-0 sobre un Saint-Étienne que se quedó con 10 hombres.
La lesión de Mbappé, quien volvió de los vestuarios al banquillo en muletas, restó algo de lustre a la obtención del cetro 13 del conjunto parisino en este certamen. Generó, además, preocupaciones de cara al duelo de cuartos de final de la Champions League previsto para el próximo mes ante el Atalanta de Italia.
Loic Perrin, central del Saint-Étienne, fue expulsado a los 30 minutos, luego de entrar de manera despiadada y derribar a Mbappé, quien se escapaba hacia el arco. Al parecer, el tobillo de Mbappé se dobló de forma irregular en la caída.
“Sólo tronó un poco”, dijo Mbappé al presidente francés Emmanuel Macron después de la final, cuando los jugadores del PSG estaban por recibir sus preseas.
Perrin cumplió su última aparición con el Saint-Étienne, 17 años después de su debut. La falta generó un altercado que incluyó empujones entre jugadores de ambos bandos.
El brasileño Neymar abrió el marcador a los 14 minutos, después de que el arquero Jessy Moulin atajó un disparo de Mbappé.
Saint-Étienne tuvo posibilidades claras de gol. Un tiro del delantero Denis Bouanga se estrelló en un palo al comienzo. Y hacia el final del primer tiempo, el arquero tico Keylor Navas le atajó un disparo al mismo atacante.
También Moulin tuvo una intervención providencial, a una mano, para desviar un tiro combado del argentino Ángel di María.
Macron habló largamente con los jugadores antes del encuentro. Se permitió el ingreso de un máximo de 5 mil espectadores en el Stade de France, en medio de las restricciones por el coronavirus, pero sólo ingresaron 2 mil 805 aficionados.
El PSG, que perdió la última Final en penaltis, no había disputado un encuentro oficial desde el pasado 11 de marzo, cuando se midió con el Borussia Dortmund en la vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones.
Saint-Étienne había jugado tres días antes de aquella fecha, en la liga francesa, que terminó cancelándose el 30 de abril, cuando restaban 10 fechas.
Pese a tener un jugador más, el PSG apenas inquietó a su rival en el complemento, salvo por un par de tiros sin mucho peligro que Moulin neutralizó atinadamente.
EVG