Al término del Gran Premio de Sakhir, Sergio Pérez dio algunas palabras para los medios de comunicación y reconoció que está viviendo un sueño y recordó que no ha sido fácil estar a tope en los 10 años que lleva en la Fórmula 1.
“Estoy sin palabras. Espero no estar soñando. 10 años me tomó. No sé qué decir. Después de la primera vuelta, la carrera había terminado, pero se trataba de no rendirse. Creo que hoy ganamos por méritos", resaltó Checo Pérez.
Al ser cuestionado de qué pasará con su futuro, ya que se encuentra en estos momentos sin escudería, pues Racing Point decidió darle su volante a Sebastian Vettel, aseguró que ya no está en sus manos y que al final de temporada sabrá si tiene espacio en Red Bull o se toma un año sabático.
"(Esta victoria) Me da un poco más de paz conmigo mismo, pero en estos momentos no está en mis manos, pero yo quiero seguir corriendo y estar aquí el próximo año", destacó el volante.
El mexicano tuvo un inicio catastrófico, pues tras chocar en la primera vuelta con Charles Leclerc de Ferrari logró escalar peldaños y poco a poco se fue metiendo a los primeros lugares, hasta que pasando la vuelta 70 la suerte le sonrió y se llevó la bandera a cuadros.
"Fuimos suficientemente inteligentes para tener una gran carrera. Cometí un error en el safety car, tenía muchas vibraciones, pero en cuanto pude recuperarme le dije al equipo: 'este auto es como un limosina'", destacó el tapatío.