Nadie sabe con certeza cuál es la fortuna que el ícono argentino del fútbol Diego Maradona dejó a sus herederos luego de una vida repleta de éxitos, alegrías, excesos y desventuras.
Pero un indicio puede darlo un contenedor que permaneció olvidado por años en un depósito de los suburbios de Buenos Aires, un verdadero tesoro para los admiradores del astro fallecido en Argentina a fin de noviembre. Allí, Maradona guardó cientos de pertenencias y obsequios invaluables que recibió durante su carrera como futbolista y entrenador.
Según una fuente que formó parte del entorno del exfutbolista, el contenedor se encuentra lacrado y bajo custodia, con todos los objetos registrados por un escribano en una carpeta, cada uno bajo un número y acompañado por una foto.
“En el contenedor hay botines y camisetas históricas, una carta firmada por Fidel Castro, una guitarra de (el músico) Andrés Calamaro y dos cajas fuertes”, dijo a Reuters el abogado Mario Baudry, quien representa a Diego Fernando -el hijo menor de Maradona- y sabe de la existencia del depósito de boca del propio Maradona.
Pelotas de Barcelona, Napoli y Boca Juniors, camisetas de Sergio Agüero, Ronaldo Nazario, Harry Kane y Hristo Stoichkov dedicadas y autografiadas, y una placa que le entregó la FIFA forman parte de los recuerdos del fútbol que hay en el contenedor, según el informe que se encuentra en la Justicia y las imágenes a las que accedió Reuters.
“Hay una sola llave del contenedor y está a disposición de la Justicia”, explicó la fuente.
El inventario menciona también varias camisas que Maradona, defensor de los gobiernos de izquierda de la región, usó en actos oficiales de los venezolanos Hugo Chávez y Nicolás Maduro, una casaca de Brasil con el dorsal 18 y el nombre “Lula” obsequiada por el expresidente brasileño y una carta que recibió en 2014 del fallecido líder cubano Fidel Castro.
rmp